Alerta por lluvias, tormentas y viento durante el fin de semana en Canarias

Una DANA (depresión aislada en niveles altos), que se ha ido desplazando hacia el sur por el oeste de la península ibérica, tenderá a situarse sobre el archipiélago este viernes, quedando estacionada en esa posición al menos hasta el domingo. La presencia de este fenómeno generará inestabilidad atmosférica en el entorno de las islas, lo que dará lugar a probables chubascos localmente fuertes y acompañados de tormenta, a partir de este viernes y durante el fin de semana.

Después de las fuertes precipitaciones registradas en la madrugada de el jueves -sin dejar grandes consecuencias- en las islas, lo más probable es que los chubascos más intensos comiencen este viernes por la tarde, afectando especialmente a las islas orientales, donde podrían ser localmente fuertes -alcanzando o superando los 15-30 litros en 30 minutos y acumulando incluso los 50 litros en doce horas-, sin descartar que afecten también a medianías orientadas al sureste de Tenerife y Gran Canaria.

Esta situación de inestabilidad puede generar actividad eléctrica atmosférica en toda la comunidad autónoma, lo que ha llevado a la Dirección General de Emergencias a declarar también la prealerta por tormentas en todo el archipiélago, ya que pueden ser localmente fuertes.

La fuerza de los vientos previstos ha hecho que la DGE declare también la prealerta en las islas occidentales, donde se espera viento del norte y noroeste flojo a moderado con intervalos fuertes y probables rachas muy fuertes que podrán superar los 70 kilómetros hora en cumbres y medianías altas del norte.

Asimismo, el Gobierno mantiene la prealerta por fenómenos costeros en toda la comunidad autónoma, declarada el pasado miércoles 20 de marzo, ya que se mantiene el mal estado del mar en costas abiertas al norte y al oeste con olas de mar combinada de 2,5-3,5 metros.

Ante esta situación de inestabilidad, se recomienda evitar circular en coche durante las lluvias fuertes. Si es imprescindible preste especial atención a la altura del agua, moderando la velocidad y vigilando los frenos. Si el vehículo comienza a llenarse de agua, es mejor abandonarlo. Debe tener especial precaución con la formación de placas de hielo en zonas altas.

Durante la tormenta no se refugie bajo los árboles, la madera mojada también es conductora de la electricidad. Desenchufe los aparatos eléctricos, las subidas de tensión pueden dañarlos o se pueden producir descargas eléctricas.

Para evitar incidentes por las fuertes rachas de viento previstas revise las viviendas para que no haya cornisas, balcones o fachadas en mal estado que puedan producir caídas de cascotes y escombros y retire los objetos que puedan caer a la calle y provocar un accidente.

Además, recuerde no circular con vehículos por carreteras cercanas a la línea de playa y no se sitúe en el extremo de muelles o espigones, ni se arriesgue a sacar fotografías o vídeos cerca de donde rompen las olas.

Asimismo, es probable que el sábado sea el día más adverso, con chubascos generalizados, acompañados de tormenta, que serán más probables, intensos y persistentes en el norte de las islas montañosas. Se espera que vayan extendiéndose de oeste a este durante el día, sin descartar granizo de forma ocasional y con cotas de nieve en torno a 2.000-2.200 metros. Además, soplarán viento del norte con intervalos fuertes y rachas muy fuertes en las islas de mayor relieve, que afectarán especialmente a medianías orientadas al norte y cumbres de la provincia occidental.

El domingo todavía continuará la inestabilidad, aunque es probable que la DANA comience a alejarse de las Islas, por lo que se espera que los chubascos sean menos intensos que el día anterior, tendiendo a remitir el lunes. No obstante, existe una alta incertidumbre respecto a la posición y la evolución de la DANA, por lo que actualmente no se puede descartar que el episodio pueda extenderse.

Después de un invierno seco, caluroso y con numerosos capítulos de calima hasta las últimas semanas, la primavera arranca así en Canarias con una gota fría que ya ha dejado tormentas y granizo en la península. Según David Suárez, delegado de la Aemet en Canarias, «tras la DANA del pasado mes de diciembre, este es el fenómeno meteorológico más complicado de los últimos meses, porque en este tipo de depresiones siempre existe mucha incertidumbre a la hora de hacer las correspondientes proyecciones», agregó.

Por otro lado, anticipó que ya en plena Semana Santa se prevé «una situación más estable, con el retorno del alisio», dibujándose un panorama «similar al de hace unos días, con nubosidad y viento en el archipiélago, con las precipitaciones más esporádicas y suaves, concentradas en la franja norte de las islas».

En este sentido, la Aemet señala que «salvo cambios posteriores, no se prevé episodios de calima durante este periodo vacacional», algo que se ha convertido en una constante durante el pasado invierno en Canarias.

En definitiva, un escenario similar al que se destilaba una década atrás , dada la singular climatología de Canarias que se ha visto alterada en los últimos años, con las esperadas lluvias que tanto han escaseado desde el pasado 2023 y el presente 2024, al mismo tiempo que el buen tiempo hará acto de presencia posiblemente en pleno epicentro de la Semana Santa.

Ya el sábado, desde la madrugada, el aviso por lluvia y tormenta se extenderá a todas las islas, añadiéndose el riesgo además por viento en La Palma, La Gomera, El Hierro y Tenerife por rachas de hasta 70 kilómetros por hora.

Por su parte, el Cabildo de Lanzarote también activó el Plan de Emergencias ante la prealerta por fenómenos meteorológicos adversos. Desde las 9:00 de mañana hasta las 21:00 horas se activa la alerta también en La Graciosa. Asimismo, siguiendo las recomendaciones de la Dirección General de Emergencias del Gobierno de Canarias, se suspenderán las actividades lúdicas, deportivas, docentes y culturales al aire libre en el mismo horario.

El presidente Oswaldo Betancor ha instado a la población a extremar las precauciones y seguir las siguientes medidas de prevención ante el riesgo de inundaciones, incluyendo la revisión de tejados, la preparación de suministros básicos y la atención a las indicaciones de las autoridades locales y los servicios de emergencia.