La pandemia hace caer la natalidad a las cotas más bajas de todo el milenio

En términos precisos, entre enero y abril hubo constancia de 331 partos, con la particularidad de que 96 de ellos fueron asistidos en el pasado mes, mientras que los 235 restantes se concretaron a lo largo de los tres primeros meses. O lo que es lo mismo, los natalicios de abril demuestran en qué grado se dio pie a la procreación en términos normales en cuanto la vida cotidiana recuperó cierto todo de normalidad, toda vez que los bebés fueron fruto de relaciones sexuales mantenidas en el verano, cuando ya no se daba el confinamiento severo.

Con estos números, en consecuencia, parece bastante probable que el año se complete con apenas un millar de partos, lejos en consecuencia de ejercicios no muy alejados en el tiempo, con al menos 1.200 natalicios. En algún caso, con incluso valores cercanos a los 1.700 alumbramientos en un solo año, como llegó a acontecer en 2007 y en 2008, según estudios publicados por el Centro de Datos del Cabildo.

Entre los partos de condición habitual y los alumbramientos múltiples constatados en el primer tercio del año, el personal del Hospital Doctor José Molina Orosa asistió al nacimiento de 336 bebés. Y como ya pasara en los primeros meses del pasado año, con la particularidad de que hubo una ligero predominancia del sexo masculino; a diferencia de lo que aconteciera en el primer cuatrimestre de 2019, cuando el sexo femenino fue el predominante.

En concreto, nacieron entre enero y abril un total de 175 chinijos, frente a 161 chinijas. La diferencia, no obstante, apenas es de relevancia, con lo que es probable que pueda verse invertida a la conclusión del ejercicio.

Por otro lado, llama la atención el hecho de que en 2021 está siendo mucho más frecuente la práctica de cesáreas a la hora de facilitar los alumbramientos. En los datos ceñidos al primer trimestre, esta técnica se tuvo que emplear en uno de cada tres partos, cuando lo común en los años precedentes había sido emplear esta asistencia en una cuarta parte de las intervenciones, atendiendo a los números oficiales.

En cuanto a la anestesia epidural, se hizo uso de esta ayuda para aliviar a las madres en dos tercios de los alumbramientos.

Como curiosidad añadida, en los años finales del pasado siglo y el arranque del actual, la tasa de natalidad (nacimientos en función del número de habitantes) rondó la cota de 13. Fue bajando con el pasado del tiempo, por reducirse el número de partos y crecer el censo. Retrocedió a menos de 10 a partir de 2011; mientras que a partir de 2017 se situó por debajo de 9. Los números de 2021, en caso de seguir la tendencia, se cerrarán con un valor próximo a 6,5; la mitad que hace dos décadas atrás.