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La isla mágica más allá de Manrique

La isla mágica más allá de Manrique

Aunque Lanzarote es mundialmente conocida por las intervenciones de Manrique en su naturaleza, la isla ofrece posibilidades inagotables de experimentar su legendaria energía

Lourdes Bermejo y / Arrecife

Jueves, 1 de enero 1970

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Lanzarote presume de tener uno de los mayores niveles de fidelización turística. Así, quien ya conoce la obra de Manrique, reflejada en la red de Centros de Arte, Cultura y Turismo, dedica las siguientes visitas a experimentar la especial energía que desprenden otros rincones de la isla.

Los seguidores del artista pueden dedicar un día a conocer el estilo de vida personal de César, visitando su casa de Haría, una casa museo abierta hace unos años en el pueblo norteño, donde el creador eligió retirarse en sus últimos años. El propio pueblo ofrece su hospitalidad al viajero. Es muy recomendable visitarlo en las mañanas de sábado, cuando se celebra el mercado.

Otra propuesta bien conocida de los residentes es la playa sureña de Janubio, 800 metros de arena negra a escasa distancia de Los Hervideros. No obstante solo se recomienda para el paseo, dada su peligrosidad. Poco transitada, Janubio es perfecta para disfrutar de un tiempo de relajación y contemplación del entorno, por la cercanía de las Salinas de Janubio y el Charco de Los Clicos. El retiro puede endulzarse con una buena comida en alguno de los restaurantes de Femés o El Golfo. Aunque La Geria es de sobras conocida por el gran público, numerosos residentes suelen hacer parada en el Museo del Vino de El Grifo o Bodegas Rubicón, que dan opción a degustar vinos acompañados con enyesque. Teguise, que celebra este año los 600 de su fundación, es otra buena opción para los amantes de la cultura, ya que en la villa se ubican multitud de museos, como el de la Piratería o el Timple, además de contar con un impresionante conjunto histórico. La visita a Teguise no puede acabar sin ver la playa de Famara, que se extiende varios kilómetros, coronada por el Risco del mismo nombre. El pueblo de La Caleta cuenta con una animada oferta de restaurantes marineros.

La villa cumple 600 años de historia.

Este año es especialmente recomendable para visitar Teguise, que cumple 600 años desde su fundación con un amplio programa de eventos culturales relacionados con su patrimonio e historia. El municipio apuesta por el binomio economía y cultura, y ha elaborado mapas indicativos de la enorme oferta gastronómica, comercial y cultural que ofrece la villa. Entre las visitas obligadas, la fortaleza de Santa Bárbara situada sobre el volcán de Guanapay que alberga el Museo de la Piratería;

la casa museo del Timple, ubicado en la Palacio Spínola, que presenta este instrumento tradicional canario como elemento central de una amplia colección de cuerdas y, como reclamo comercial, el mercadillo dominical, el mayor en extensión y visitantes de España.

Manrique en su intimidad.

La casa museo de César Manrique en Haría permite conocer la personalidad y estilo de vida del artista. Se muestran las estancias de la casa que eligió para dedicarse casi en cuerpo y alma a la creación, al final de su vida.

De La Caleta al Rincón

Una de las experiencias más relajantes que ofrece Lanzarote es visitar la playa de Famara, tanto para practicar deportes acuáticos como para pasear desde el pueblo bordeando el Risco, hasta El Rincón.

Costas volcánicas

La visita al sur de la isla no puede ignorar zonas fuera del circuito turístico que, sin embargo, guardan toda la belleza volcánica lanzaroteña. Desde la playa de Janubio hasta el charco de los Clicos, Los Hervideros, o el pintoresco pueblo de El Golfo.

La ruta del vino

El paraje de La Geria merece una visita sin prisa para degustar los caldos de la isla, con la variedad malvasía volcánica como reina. Bodega El Grifo, la más antigua de Canarias, acoge un museo del vino.

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