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Los municipios costeros de Gran Canaria cuentan ya en sus playas con algunos de los 19 tótem de emergencia instalados por el Cabildo. Se trata de un sistema innovador y autosuficiente, que al romper el cristal con un martillo se activa en pocos segundos una llamada al 112 y una sirena, a la vez que permite acceder a uno de los tres chalecos salvavidas inteligentes con patente grancanaria, que se inflan en solo dos segundos al entrar en contacto con el agua al arrojarlos desde la distancia a la persona que esté en riesgo. Por ello no es necesario activar ningún otro mecanismo ni quitar la funda para que funcionen, ni mucho menos poner en peligro la seguridad del rescatador.
El proyecto ha sido desarrollado en colaboración con la empresa Leonar Creations SL y tiene como objetivo crear una red de seguridad inteligente en el litoral, contribuyendo a la prevención de ahogamientos. Este sistema, ya instalado en 100 playas de todas las islas del Archipiélago, ha permitido salvar más de 30 vidas en los últimos tres años.
La presentación de estos dispositivos denominados 'OneUP' tuvo lugar este miércoles en la playa de Arinaga, en Agüimes, por parte del presidente del Cabildo, Antonio Morales, el alcalde del municipio, Óscar Hernández, y el director de la empresa, Saúl de León, además del consejero de Presidencia, Teodoro Sosa, área que lo ha costeado.
Los tótem han sido estratégicamente ubicados en las playas escogidas por cada municipio, con el objetivo de maximizar la seguridad en el litoral al reducir drásticamente el tiempo de respuesta en situaciones de riesgo, ya que cualquier ciudadano que vea que un bañista está en apuros puede activarlos y a la vez llamar a los servicios de emergencias en un solo paso.
Morales incidió en la importancia de estos dispositivos, mucho más teniendo en cuenta que las costas de Canarias registraron el pasado año 72 personas fallecidas por ahogamiento y en lo que va de año ya perdieron la vida 24, precisó. Asimismo, animó a los municipios a instalar más tótem en otras playas, además de los entregados por el Cabildo con una inversión de 235.000 euros que implica dos años de mantenimiento.
El tótem 'OneUP' es una columna de acero inoxidable de unos dos metros de alto, que contiene hasta tres salvavidas en su interior y funcionan de manera autónoma y con energía fotovoltaica, por lo que no dependen de la red eléctrica.
Estás columnas están conectadas con los servicios de emergencia y saben la ubicación exacta de cada uno de ellos, ya que hay un protocolo abierto con la sala del 112. Si se necesitase rehacer la llamada se puede hacer desde los botones que presenta el tótem, ya que uno de ellos conecta con el 112 y el otro con la Policía Local de cada municipio.
Desde 'OneUP' destacan que este sistema ha sido diseñado para maximizar la seguridad sin necesidad de conocimientos previos en salvamento. Su implementación en Gran Canaria representa un modelo a seguir en otras regiones de Canarias.
El diseño de este dispositivo nació fruto de la casualidad, cuando Saúl de León Arteta, responsable de la empresa, estaba viendo un documental sobre refugiados en el Mediterráneo. Se percató que durante una entrevista que le hacían a voluntarios de Cruz Roja atendiendo a refugiados, comentaron que en muchas ocasiones los primeros en llegar a la zona de naufragio eran ellos en moto de agua o helicóptero y se encontraban 60 o 70 personas ahogándose a la vez y lo único que podían hacer era quedarse alejados a una distancia de seguridad, ya que al estar en estado de pánico podría agarrar la pequeña embarcación y hacerla virar, peligrando la vida de los rescatadores. Y es que apenas contaban con material de rescate debido a las dimensiones de la embarcación.
Tras varios días de análisis llegó a la conclusión que si estos profesionales contaran con un producto ligero, pequeño, compacto, que se pudiera transportar en gran cantidad y que se pudiera lanzar desde una distancia segura este problema podría verse resuelto.
A medida que el producto se fue desarrollando, se dio cuenta de que el ahogamiento es una causa más compleja, ya que no solo afecta a persona a bordo de embarcaciones sino que el gran problema reside en las que hacen uso de entornos acuáticos y costeros. Desde entonces, el proyecto ha evolucionado hasta convertirse en un referente en seguridad acuática, siendo adoptado en numerosas regiones para salvar vidas.
'OneUP' es la evolución del aro salvavidas, que tiene un peso de 370 gramos y unas medidas menores a 18 centímetros, y es siete veces más ligero que un aro salvavidas tradicional y 20 veces más pequeño. Además, es en forma de herradura, ya que en situaciones de pánico es más fácil de colocar, puntualizó de León.
Asimismo, animó a instalar más dispositivos ya que en las islas hay más de 3.000 puntos de baño, por lo que los colocados hasta ahora solo cubren el 1%. Por otro lado, destacó que han tenido pocos actos vandálicos debido a que cuando se activa suena una sirena que los disuade.
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