Crimen de San Roque: la víctima había fallecido cuando quemó su cuerpo
Tribunales ·
Una de las tesis de la investigación es que Paco pudo haber incinerado viva a Angelines, pero el Toxicológico lo descartó
Según el informe del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, el autor confeso de la muerte violenta de Angelines Fernández en el barrio de San Roque, quemó su cuerpo cuando la víctima ya no tenía constantes vitales. Este dato es importante para la investigación puesto que una de las tesis que se planteaban era si Francisco José F.H. –conocido por Paco– había intentado incinerar a su tía en la pira crematoria que había construido dentro de la vivienda, cuando ésta aún seguía con vida.
Este planteamiento se sustentaba en el informe preliminar de autopsia en el que los forenses describieron que Angelines «podría estar viva en el momento del incendio».
Tanto la Fiscalía como la defensa están recabando en esta fase de instrucción todas las evidencias posibles para argumentar las tesis que plantearán en un futuro juicio ante un jurado popular, por lo que informes de este tipo son clave para determinar la violencia y detalles de los hechos. En este caso, lo que explican los forenses es que el «depósito negro de humo» que hallaron en la laringe de Angelines, tuvo un «origen pasivo», es decir, que no puede ser considerado «indicador de haber respirado en el foco del incendio». De esta forma, determinan los expertos que es un indicador que «por sí solo no prueba que la fallecida estuviera viva en el momento del incendio».
Estrategias
En su momento, el anterior letrado que ejercía la defensa de Paco argumentó en el escrito que remitió para pedir su libertad provisional que no se apreciaban «lesiones graves» en el cuerpo de la fallecida, por lo que deslizó que estaríamos «ante un delito de lesiones provocado por dos fatales golpes propinados con las manos, con un lamentable resultado de muerte».
Por su parte, la Fiscalía ha entendido desde el primer momento que los hechos producidos el 7 de mayo de 2022 cuando el investigado acabó con la vida de su tía de 90 años, podrían ser constitutivos de un delito de homicidio o asesinato.
Ahora, tras los resultados del Toxicológico, la instrucción de este crimen de San Roque entra en una fase decisiva que tendrá como principal punto de interés la redacción del informe final de autopsia que tendrán que realizar los forenses del Instituto de Medicina Legal de Las Palmas. El contenido del mismo determinará –con mucho más detalle– las causas de la muerte de Angelines y el contexto de la misma.
Lo que ya ha quedado despejado es que el documento definitivo será diferente al preliminar que describía que Angelines «podría estar viva en el momento del incendio», después de los hallazgos analizados por el Toxicológico. Los forenses describieron además que la fallecida presentaba dos lesiones que no provocaron fractura craneal en la zona occipital derecha y temporal izquierda. Asimismo, se evidenció una fractura de la pierna derecha que pudo «haber sido consecuencia del fuego».
Francisco José F.H. está actualmente en situación de libertad provisional investigado por un delito de homicidio y tiene que comparecer en el juzgado todos los días 8 y 23 de cada mes. Además, le retiraron el pasaporte y se le ha prohibido su salida de la isla de Gran Canaria.
Paco, de pasado delictivo y presente con conflictos familiares y vecinales
La vida de Francisco José F.H. –conocido por Paco– ha estado llena de situaciones complicadas que le llevaron incluso a la cárcel en el pasado y, en el presente, acumuló conflictos familiares y vecinales.
Paco fue condenado en 1990 a nueve años de cárcel por robo y tenencia de armas sin permiso y también acumuló otras penas por delitos de falsedad, falsificación de documentos públicos y uso indebido de nombre o título. Tras salir de prisión, su tía Angelines lo acogió cuando dormía en la calle y lo dejó instalarse en el primer piso de su casa en el barrio de San Roque, una vivienda independiente que él construyó y en la que compartían entrada y zonas comunes.
Con el paso de los años, la relación entre Paco y Angelines fue deteriorándose y se escuchaban en su casa continuas peleas y discusiones entre ambos. El motivo principal era, según su entorno, que el investigado quería legalizar la obra que había realizado para poder dejarla en herencia a sus hijos y la propietaria de la casa ponía reparos.
Esto provocó muchas fricciones entre Paco y sus familiares, que veían que se trataba de una maniobra para quedarse con la vivienda íntegra de su tía.
Varios de sus vecinos también tuvieron problemas con Paco debido a su incívico comportamiento. Incluso, llegaron a grabarle un vídeo, fechas antes del crimen, en el que Paco le gritó bruscamente a la anciana cuando esta se quejó de los ladridos de los perros: «Cállate que estoy cansado. ¿Qué hacemos Luna, bajamos y le pegamos una paliza a la loca esta?», se escuchó.
