La capital estrenará un servicio de recogida de basura puerta a puerta
También se aportará por un quinto contenedor de basura para resiudos orgánicos y por funiculares y más escaleras mecánicas en los barrios
Otro de los grandes frentes que el Ayuntamiento se plantea de cara a la próxima década, dentro del nuevo Pacto Verde Local, es el de la mejora de la gestión de la residuos. Aquí, el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, anunció que se está planteando la posibilidad de instaurar en algunos barrios la recogida puerta a puerta. Se trata de un sistema en función del cual el vecino o comerciante entrega al servicio municipal sus bolsas de la basura según un calendario semanal para cada fracción recogida y en un horario estipulado.
Esta modalidad de gestión suele aplicarse en zonas de baja densidad. Para el caso de Las Palmas de Gran Canaria, el regidor socialista indicó que se podrá aplicar «en zonas específicas» siempre y cuando «sea factible y los costes económicos no se disparen». En todo caso, Hidalgo insistió en que será necesario que los ciudadanos cambien los hábitos actuales.
Una de esas adaptaciones será la que introduzca el quinto contenedor de basura, que empezará a extenderse por la ciudad a partir del año que viene.
El nuevo depósito marrón recogerá los restos de comida, papel de cocina y servilletas usados, así como plantas y hojas. El resto de los residuos que ahora mezclamos con los anteriores en la bolsa gris se mantendrán separados (colillas, chicles, el polvo que se barre...) porque se trata de restos no orgánicos. Con ello, se trata de mejorar los niveles de reciclado, que ahora se centrará en la recuperación de la bolsa marrón de basura.
Los desechos orgánicos, que habrá que depositar en el quinto contenedor, suponen el 40% del total de los que se generan en los hogares, según indicó el primer edil palmense.
Aparte de estos cambios, también se apostará por la integración de papeleras en el nuevo mobiliario urbano y por la introducción de la figura del operario de proximidad.
«El objetivo es fomentar la energía circular y ofrecer un servicio público más eficiente y adaptado a las demandas del siglo XXI, que van más allá de recoger los residuos y que puede suponer una oportunidad desde el punto de vista económico», aseveró Augusto Hidalgo.
Cambios en la movilidad
La búsqueda de una «ciudad caminable» será otro objetivo irrenunciable en el plan de transformación verde de Las Palmas de Gran Canaria ya que no solo garantizan un desarrollo sostenible sino que también fomentan la accesibilidad universal.
Proyectos como el de barrios pendientes -un plan de rehabilitación de los riscos- se ponen como ejemplo de la dirección en que trabajará el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria dentro del Plan de Movilidad Urbana Sostenible. Pero además, «tendrán un correlato con ascensores, funiculares y cintas de transporte», tal y como señaló el alcalde de la ciudad.
El regidor aclaró que se están fijando en soluciones a la movilidad que se están aplicando en otras ciudades como Vigo, Bilbao, así como en urbes de Perú y Colombia, para garantizar la accesibilidad vertical y que los desniveles no sigan siendo una barrera urbanística para los sectores de población mayores dificultades de movilidad.
Esta apuesta deberá ofrecer mejor resultado que los sistemas que ya están implantados en la ciudad están casi todos parados.
En este proyecto, bautizado como ciudad activa, se hace mención también al plan de infraestructuras deportivas, que trata de «garantizar la salud de los ciudadanos a largo plazo y que cose los distintos barrios». Para ello se cuenta con una inversión de más de 30 millones de euros, tanto en lo referido a la creación de nuevas infraestructuras como a la reparación de las ya existentes.
Todo el contenido del Pacto Verde Local también se quiere pasar por el tamiz de la participación ciudadana. «Si no integramos a la ciudadanía en la transformación de la ciudad, entonces esa transformación está abocada al fracaso», expuso Augusto Hidalgo.
Por eso, el alcalde anunció que en las futuras convocatorias de los presupuestos participativos se permitirá que los vecinos voten un porcentaje determinado de proyectos de mejora medioambiental.
Los pilares de la ciudad verde
El nuevo Pacto Verde Local, que asume el compromiso de reducir un 40% la emisión de gases de efecto invernadero procedentes de la ciudad en el horizonte de 2030, se basa en cinco grandes frentes:la lucha contra el cambio climático; la apuesta por una movilidad urbana sostenible; la mejora en la gestión de los residuos;la planificación de los recursos hídricos y el incremento de la eficacia del ciclo integral del agua; y la propia ejemplaridad del Ayuntamiento, que deberá esforzarse para elevar sus niveles de eficiencia energética y de manejo de residuos.
La propuesta municipal recoge el guante del 'Green New Deal' que popularizó la congresista estadounidense Alexandria Ocasio-Cortez y que consiste en la apuesta por la inversión pública para generar una economía descarbonizada y promover la creación de empleo para superar la crisis actual.
«La tecnología nos permite crecer y generar empleo, pero siendo sostenibles», planteó Hidalgo en la presentación del Pacto Verde Local que tuvo lugar en el centro ambiental municipal de El Pambaso con la presencia de los concejales Encarna Galván (Presidencia), Inmaculada Medina (Servicios Públicos), Prisco Alfonso Navarro (Participación Ciudadana) y Belén Hidalgo (Sostenibilidad Ambiental).
El Ayuntamiento trabaja ya en la conformación de los proyectos que serán presentados al Gobierno de España para su inclusión en el plan nacional antes del 30 de abril, aunque por el momento no está claro el procedimiento de concurso.
Algunas de las actuaciones ya están ejecutadas o en proceso, como el Plan de Movilidad Urbana Sostenible 2030, en el que se enmarca el Plan Director de la Bicicleta o la implantación de la MetroGuagua, con más de 100 millones de inversión. También se cita aquí la creación de recorridos peatonales y accesibilidad vertical para cohesionar la ciudad y fomentar una ciudad activa;el IBIsocial, una bonificación de hasta el 50% en el catastro de quienes apuesten por instalar placas fotovoltaicas en empresas y en viviendas; o el fomento del deporte, que cuenta con una inversión histórica de más de 30 millones de euros para renovar y crear infraestructuras facilitando el acceso a todos los barrios.
Otras, en cambio, tienen que ser impulsadas en los próximos años, como el plan de infraestructuras hidráulicas.