Ingenio prohíbe ya estacionar en las calles del casco rehabilitadas

Con la intención de avisar a los vecinos, el consistorio buzoneó este viernes por las viviendas de las calles afectadas una carta firmada por la alcaldesa, Ana Hernández, en la que se les anticipa esta prohibición. «A partir del día de la fecha, queda prohibido el estacionamiento en toda la zona», subraya la regidora. En realidad, la norma lleva consigo que en cinco de esas vías, que son Arcediano López Cabeza, Chantre Espino Juárez, La Rueda, Marte y El Cedro, no esté permitida la circulación de vehículos. Ahora bien, les aclara también la alcaldesa, a los vecinos sí se les permitirá el acceso «para acciones de carga y descarga, vehículos de emergencia y para la atención a personas mayores».

Ana Hernández aprovecha esta comunicación para agradecerles «la colaboración y paciencia» que han mostrado durante las obras, que se prolongaron más de lo debido. Empezaron en agosto de 2019, estaba previsto que acabaran en cuatro meses y duraron casi dos años. Con todo, la alcaldesa subraya que gracias a esta intervención, «el centro histórico se convierte en un lugar de referencia para el municipio». Les dice que ahora toca conservarlo y mantenerlo y que a ese objetivo se debe la aplicación de estas medidas que les anuncia. «Que sintamos que tanto esfuerzo ha valido la pena». Les explica que para ello «se hace necesario tener en cuenta diversos aspectos tendentes a confluir las necesidades de las personas residentes con las características propias de un espacio de esta naturaleza».

La carta contribuye a dar certidumbre a los vecinos. algunos de los cuales se quejaban porque no sabían cómo podrían actuar a partir de ahora. Además, les desconcertó que parte de la señalética colocada tenga un error. Dice que solo deja circular a vehículos de emergencia y no contempla las otras excepciones de las que habla la alcaldesa. Las descubrieron un día y tuvieron que volver a taparlas hasta que sean sustituidas.

Ahora solo queda que se habiliten los solares para aparcar en el casco a los que se ha comprometido el gobierno. Negocian para poner en uso al menos dos.