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Las asociaciones de madres y padres (AMPAS) de usuarios de todos los centros de atención a discapacitados intelectuales graves (CADI) han solicitado al Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IAS) del Cabildo que, de manera urgente, modifique el horario que cubre el personal médico de este servicio público, que ahora es de 08.00 a 15.00 horas de lunes a viernes, incluyendo sábados, domingos y festivos, con la correspondiente dotación presupuestaria, así como la mejora de su retribución y la cobertura inmediata de las bajas que existen en la actualidad.
En un comunicado conjunto, las AMPAS de los CADI subrayan que los contratos de trabajo del personal médico son sólo de cuatro horas diarias de lunes a viernes, quedándose los centros sin facultativos los fines de semana y festivos. Además, «se ven sometidos a una carga de estrés y agotamiento mental que no soportan más de un año», motivo por el que acaban abandonando este trabajo.
Esta jornada de trabajo viene establecida en los pliegos de prescripciones técnicas que rigen los contratos de gestión de este servicio público por parte del Cabildo, «lo cual da lugar a que continuamente los CADI estén sin médico». Se trata, dice la nota, de «un problema de falta de personal endémico, que afecta también a parte del personal de enfermería» de estos centros.
Al respecto, las AMPAS consideran que esta provisionalidad en el personal médico obedece también a que ganan mucho más en otros establecimientos sanitarios. «Se van porque encuentran mejores condiciones laborales en el Servicio Canario de Salud, por sus salarios más elevados», detallan.
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La falta de personal médico influye en otros colectivos de trabajadores sanitarios, enfermería y auxiliares, «generando en estos profesionales un estrés laboral y un clima de trabajo negativo, y no menos importante, repercuten todas estas deficiencias de personal en los usuarios de los CADI».
Más en concreto, la asociación de padres y madres de los CADI de El Tablero de Maspalomas, Las Longueras (Telde), Padre Cueto (Guía) y Reina Sofía (Las Palmas de Gran Canaria) lamenta la falta de facultativos en el centro de San Bartolomé de Tirajana y que de Guía lleva más de ocho meses sin médico propio. Quien presta este servicio, indica el colectivo, acude a este centro del norte los lunes, miércoles y viernes y los martes y jueves se desplaza al centro de Telde.
«Aunque estos centros cuentan con enfermeros, estos profesionales no pueden prescribir medicamentos, ni prestar la atención sanitaria que requiera una formación superior», recuerdan las familias de los usuarios de los CADI de la isla.
Los CADI son centros de atención a personas con discapacidad intelectual grave en los que el personal sanitario, al igual que el personal cuidador, «es uno de los pilares fundamentales», concluye el comunicado.
Los padres y madres de usuarios de los CADI reclaman al IAS y al Cabildo las averiguaciones exigidas, por si hubo negligencia médica en la protección de la salud, sobre el fallecimiento de Manuel Molina Díaz (Manolito), un usuario del centro de El Tablero, el 28 de julio, tres días de agonía después de atragantarse cuando le daban el desayuno en el CADI durante un festivo en el que no había médico. «La experiencia profesional es muy relevante, y ante las graves patologías de los usuarios, determinar la deficiente ejecución técnica de una intervención, olvidando las cautelas exigidas, haciendo un mal uso del material de prevención, puede llevar a errores burdos o evidentes que permiten concluir una impericia profesional», indican en su comunicado.
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