Campaña para que el árbol de la seda no se expanda por el suroeste de Gran Canaria
La resistencia a la aridez incrementa la capacidad de propagación de esta especie invasora | Las labores de control se están realizando en zonas como El Veril, el barranco de La Aldea o Tasarte
CANARIAS7
Las Palmas de Gran Canaria
Martes, 5 de marzo 2024, 17:10
El Cabildo de Gran Canaria, a través de la empresa pública Gesplan, trabaja en las labores de control de la especie exótica invasora 'Calotropis procera', conocida como árbol de la seda o manzano de Sodoma, en La Aldea de San Nicolás y San Bartolomé de Tirajana.
Las accciones buscan detener su expansión e impedir la afección a los ecosistemas locales extrayendo la planta con seguridad para evitar el rebrote y la dispersión de semillas en zonas como El Veril, el barranco de La Aldea o Tasarte.
El consejero de Medio Ambiente, Raúl García, explica que este árbol «afecta a poblaciones de cardonal-tabaibal, que tienen un enorme interés en Canarias, y a otros endemismos asociados a este ecosistema».
Esta especie, originaria del Sáhara, predomina en zonas secas del sur y suroeste de la isla. Su resistencia a la aridez y la adaptación a la salinidad marina y a suelos alcalinos y muy pobres en nutrientes facilitan su expansión.
Es un pequeño árbol siempreverde con savia lechosa blanquecina. El tronco es relativamente recto, alcanza en las islas hasta dos metros de altura, con hojas grandes y duras de hasta 20 centímetros de largo.
Inicia su fructificación a los cuatro o cinco años, observándose habitualmente frutos en distinto grado de madurez a lo largo de todo un año, lo que tiene como consecuencia un aporte continuado de semillas al medio con gran capacidad de expansión y superviviencia, porque se dejan arrastrar fácilmente por el viento, animales o el agua.