El Cabildo refuerza equipos para rescatar a las más de 2.000 pardelas que podrán caer en Gran Canaria

El Cabildo de Gran Canaria ha reforzado sus equipos para afrontar con mayores garantías el rescate de los más de 2.000 pollos de pardelas cenicienta, 'Calonectris diomedea borealis', que previsiblemente podrán caer a tierra en los próximos 15 días, deslumbradas por la contaminación lumínica, intensificada por luces led blancas en muelles, calles y paseos costeros.

Esta ave marina, una de las más grandes de España, vive en el Atlántico y solo viene a tierra, en este caso, a Gran Canaria, para reproducirse. Vuelve todos los años tras cruzar medio mundo y es en estos días cuando las crías salen de sus nidos y alzan el vuelo.

Pascual Calabuig, director del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Gran Canaria, advirtió este miércoles de que esta será una campaña crítica porque el 1 de noviembre, fijado como día punta para la salida de los pollos de sus nidos o huras, ubicados en cuevas en los cantiles costeros de la isla, coincidirá con luna nueva, lo que les dificultará aún más la orientación y las expondrá a la contaminación de luminarias y otras fuentes de luz artificial.

Se las ve revoloteando alrededor de las farolas hasta que caen, y dado que es un ave marina, se maneja mal en tierra, por lo que, en cuanto cae, no puede por sí sola remontar el vuelo. La zona crítica en la isla es la costa de Agaete y la mayor colonia está en Veneguera (Mogán).

El consejero de Medio Ambiente, Raúl García, anunció este miércoles el inicio de una campaña de sensibilización ciudadana para que colabore y alerte en cuanto descubra una parcela accidentada e informó también de las medidas de refuerzo de las que se ha dotado el Cabildo de cara a estos días clave, entre el 23 de octubre y el 10 de noviembre. «Se espera un número récord de caídas».

Entre otras medidas, avanzó la incorporación de otros ocho operarios y tres vehículos adicionales a la búsqueda y recogida de pollos caídos y desorientados, y la contratación de una empresa especializada en rescates en mar y en altura, Tagorock. Calabuig recordó que el año pasado salvaron a más de 2.000 pardelas y que eso supone un 40% de las crías de las 5.000 parejas que se estima nidifican en Gran Canaria. En estas tareas colabora de forma activa y eficaz la asociación Amigos de las Pardelas.

«Merece la pena hacer este esfuerzo porque el 95% de los rescates sale bien y el ave se recupera», detalló Calabuig. De hecho, el centro ha rescatado a 30.000 en los últimos años. Una vez logran volar, ponen rumbo, «como si fueran a vela, ayudadas por los vientos, porque no aletean», hacia Argentina o Brasil y de allí cruzan otra vez el Atlántico para acabar en el entorno del Cabo de Buena Esperanza, en Namibia (África), donde se alimentarán en su banco de pesca. Desde allí reemprenderán viaje sobre febrero de 2025 y llegarán a Gran Canaria en abril.

Eduardo Salcedo, capataz del centro y responsable de la campaña, explica que la isla la dividen en cuatro sectores que son cubiertos por equipos de operarios del Cabildo y de voluntarios. Cada unidad dispondrá de un conductor, un copiloto y asistente de ruta, un vehículo y un teléfono móvil.

En el marco de esta iniciativa se ha pedido a los ayuntamientos que apaguen las luces de las zonas próximas a los cantiles o que las bajen de intensidad.

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