San Bartolomé ejecuta un 63% de las cuentas de 2020 y suma 222 millones de remanentes
La oposición critica un bajo nivel de ejecución presupuestaria y el gobierno defiende que está en un porcentaje razonable dada la covid
El Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana liquidó el presupuesto de 2020 con unos ingresos reconocidos, no efectivos, de 93,253 millones de euros, muy por encima de los 74,5 millones inicialmente previstos, con un nivel de ejecución presupuestaria final de un 63,7%, y la acumulación de 222,1 millones de euros de remanentes de tesorería, de los que, en principio, usarán este año entre 10 y 11 millones para saldar pagos pendientes a decenas de proveedores. No obstante, el edil de Hacienda, Antonio Pérez, avanza que exploran fórmulas legales para aprovechar bastante más de ese remanente que les queda.
La oposición en el consistorio sureño, representada por el grupo AV-PP, critica al gobierno local porque entiende que ese porcentaje de ejecución revela una mala gestión económica. Les acusa de que, pese a recibir 93 millones de ingresos, solo han sido capaces de gastarse algo menos de 61 millones (60,9 millones). Es decir, les reprochan que de los 74,5 millones que inicialmente habían previsto gastar, han dejado pendientes 15 millones.
Sin embargo, el concejal de Hacienda sostiene que ese porcentaje de ejecución entra dentro de lo «razonable», y se agarra a dos claves. Por un lado, las dificultades provocadas por la pandemia, que casi paralizaron al ayuntamiento de marzo a mayo y lo dejaron al ralentí hasta junio. Y por el otro, que es un dato equiparable al de otros ayuntamientos de la isla, como la capital, con un 73% a 11 de diciembre de 2020, Arucas, con un 54% a 6 de octubre, y Mogán, con un 51% a 17 de noviembre. Pero es más, recuerda a AV-PP que en su etapa al frente del gobierno local cerraron 2017 con un 67% y 2018, con un 56%. Y también les recuerda que en 2019, el cuatripartito ejecutó hasta un 71% el presupuesto que les dejó AV-PP.
El capítulo que más lastró el porcentaje de ejecución fue el de las inversiones reales, del que solo se realizó un 8,06%
El dato que, según el concejal, lastró el nivel de ejecución fue el de las inversiones reales, con apenas un 8,06%. Lo justifica, primero, por la incorporación de los remanentes de créditos afectados al plan de inversiones financiadas con Patrimonio Municipal del Suelo y a convenios por aprovechamientos urbanísticos por importe de 9,7 millones y, segundo, por 7,6 millones en obras que o no se ejecutaron en 2020 o que se hicieron con cargo a subvenciones que hay que justificar en 2021.
En cualquier caso, Pérez aclara también que aunque conste que el 2020 se cerró con 93,2 millones de euros de derechos reconocidos, eso no quiere decir que hayan sido ingresados. En realidad, apunta, la recaudación líquida fue de 78,4 millones y llegó al 84%, por lo que al Ayuntamiento aún le quedan por cobrar 14,8 millones de esos 93. Dice que ese desfase en las previsiones de ingresos es habitual en San Bartolomé, que en los últimos años ha presupuestado siempre por debajo de lo que sabe que ingresará porque el presupuesto ha de estar equilibrado y el techo de gasto ha limitado sus posibilidades de gastar. Además, matiza que el nivel de ejecución en relación a la previsión inicial de gastos es de un 81,7%, pero que quedó en un 63,7% porque a lo largo del año se realizaron modificaciones presupuestarias por 21 millones de euros, por lo que elevó el presupuesto de gastos hasta los 95,6. De ese alza, 14,5 millones correspondieron a una incorporación de remanentes, que es obligatoria por ley, y a 6,5 millones llegados de subvenciones.
Si se suma el aumento en los derechos reconocidos en 2020, que pasó de los 74,5 millones iniciales a 93,2, y el dinero que no llegó a ejecutarse del presupuesto inicial, que asciende a 13,6 millones, el montante de lo que no se gastó pasa a ser de 32,3 millones.
AV-PP les acusa de «tomar el pelo· a la ciudadanía
El único partido en la oposición en San Bartolomé de Tirajana, AV-PP, no hace la misma lectura que hace el gobierno de las cifras que arroja el decreto de la liquidación del presupuesto de 2020, que data del 26 de febrero de este año. Esos 60,9 millones gastados de los 74,5 previstos le invitan a pensar que el ejecutivo de PSOE, NC, CC y Cs «ha sido incapaz» de ejecutar 15 millones de euros del montante que inicialmente había aprobado.
A juicio de la portavoz de AV-PP, Elena Álamo, es «una tomadura de pelo porque llevan un año largo diciéndole a los administrados que no se podían realizar actividades ni inversiones básicas como la compra de bombillos para reponer el alumbrado público» alegando carencias presupuestarias que, entiende la edil, ahora se demuestra que no existían. Se queja de que esa cantinela, la de la falta de presupuesto, la han usado como un mantra para justificar, entre otras cosas, que «las subvenciones a los clubes deportivos, a los deportistas de elite y a las ONG las hayan sacado tarde y mal y dejando a clubes fuera».
Para Álamo, «no gestionaron, no han previsto nada y no han trabajado para culminar el presupuesto, pese a que este año, con los cambios legislativos como consecuencia de la covid, era posible superar el techo de gasto». A su juicio, estos datos son «la prueba del algodón de que este gobierno no trabaja y que es insolvente y nefasto desde el punto de vista de la gestión».
