Arranca un nuevo plan de limpieza de invernaderos para cambiar la cara del sureste
La plantilla, conformada por 83 personas, comenzó la formación el 22 de junio y ya está eliminando residuos en la zona del Cruce de Sardina
El segundo plan de empleo que impulsa la Mancomunidad del Sureste para la limpieza de invernaderos abandonados en los tres municipios ya está en marcha. Las 83 personas seleccionadas para las tareas arrancaron su formación el pasado 22 de junio y tres días más tarde ya estaban sobre el terreno para dar un cambio de cara al corredor paisajístico entre el aeropuerto y el sur de la isla. Este martes tuvo lugar la presentación oficial de la iniciativa, con una dotación de 1,8 millones de euros de la Consejería de Empleo del Cabildo, que tiene como objetivo inicial adecentar un mínimo de 50 hectáreas, con la previsión de que sean varias más, por lo que próximamente se sacará una segunda convocatoria para sumar más parcelas.
En el acto, que contó con la presencia del presidente del Cabildo, Antonio Morales, el consejero de Empleo, Juan Díaz, y los tres alcaldes de la comarca, Vanesa Martín, Óscar Hernández y Francisco García, estuvieron las siete cuadrillas que trabajan en estos momentos en la zona próxima a la cooperativa Yeoward, en el Cruce de Sardina, pero que tras culminar la formación se repartirán en los terrenos ubicados a ambos márgenes de la GC-1.
La plantilla está conformada por 73 peones (17 en Agüimes e Ingenio y 39 en Santa Lucía de Tirajana), siete capataces agrícolas, dos auxiliares administrativos y un ingeniero agrónomo, que recibirán cursos de formación sobre prevención de riesgos laborales, gestión de residuos industriales, manipulador de productos fitosanitarios y de alimentos, que favorecerá no solo la adquisición de conocimientos teórico-prácticos, sino su reinserción laboral en el mercado tras la finalización del proyecto, que se prolongará hasta el 21 de marzo del próximo año. Los contratados están encantados con esta oportunidad, no solo por tener un empleo, sino por la formación y especialmente porque están orgullosos de poder mejorar el paisaje de su isla.
Con la posibilidad de un tercero
Este segundo plan arranca con la vista puesta en un tercero para terminar de cambiar la cara a una zona que es la primera que ven los turistas cuando llegan al aeropuerto de Gran Canaria. Así lo anunció Antonio Morales durante su intervención, a la vez que incidió en la necesidad de campañas de concienciación porque «no se puede seguir ensuciando para que vengan otros limpiando detrás. Hay que perseguir y castigar a quienes atentan contra el medio ambiente y tenemos que ser duros con esto y hacer un llamamiento a la ciudadanía para que estén atentos y cuando este tipo de vertidos se produzcan o cuando se termine una actividad y sus impulsores no cumplen con su obligación de restaurar los invernaderos y dejarlos en las mejores condiciones, que sean castigados por la administración local».
El trabajo realizado en la primera iniciativa fue un gran avance y tuvo un impacto positivo para la mejora del entorno, ya que se recogieron de 90 hectáreas 720 toneladas de residuos entre los que se destacan alambres y metales, madera, mallas utilizadas en actividades agrícolas, mangueras de riego de polietileno, además de restos de basura y de desechos de plásticos.
Ahora toca el turno de nuevas parcelas que se encuentran al norte de Vargas, en Agüimes, así como en el entorno de Bahía de Formas, en Santa Lucía de Tirajana, y en la zona alta de Ingenio.