'Entre todos', por los 50 años del polígono de Arinaga

Es obra de Francisco Suárez, escultor y profesor del IES Joaquín Artiles, que dona a su municipio y a los empresarios del área industrial la que será su mayor pieza de arte urbano.

La idea partió de una necesidad. Los gestores de la mayor superficie fabril de Canarias querían que la conmemoración de su 50 aniversario, que tiene lugar este año, quedase plasmada en un icono, un símbolo que recordase la gesta de haber consolidado a este pulmón económico como una referencia de gestión, de sostenibilidad y de buenas prácticas, no solo en Canarias, sino también en España.

Con esa idea, Ecoaga, la entidad de conservación del polígono, encargó una escultura a un artista local de referencia, a Francisco Suárez, un hijo de Agüimes que también ha sido testigo, aunque sea indirecto, de esa evolución y de los beneficios que ha deparado para el desarrollo económico y social de este pueblo y, por ende, de toda Gran Canaria.

En principio, habían pensado en un busto, pero el escultor sugirió una pieza que diese mayor visibilidad a la conmemoración y que simbolizase a qué ha dado lugar esa red que con los años ha conformado el polígono. La base de su idea la obtuvo de las abejas, fuente de inspiración que, por otra parte, Suárez reconoce que viene siendo recurrente en sus últimas creaciones.

Igual que una colmena, una empresa o un polígono industrial es una estructura organizada que funciona como la suma colaborativa e implicada de sus distintas partes. Con esa filosofía de partida, Suárez, licenciado en Bellas Artes, diseñó «una especie de panal tridimensional que a la vez parece una flor enorme».

Está conformada por una serie de módulos hexagonales, cada uno de un color. «No son hexágonos propiamente, sino hexágonos en cruz», se explica Suárez. En total, serán 11 módulos, con 11 colores. Estará toda la gama, pero el central será el amarillo. «La estructura de base de la pieza es metálica y ya está hecha, e irá forrada de un material nuevo, mediante planchas de madera y hormigón, llamado viroc, que hará que el acabado final no sea tan pesado».

Y es que, como bien apunta Suárez, él es escultor, no ingeniero, de ahí que el diseño original haya experimentado ciertos cambios. «Hay condicionantes técnicos y económicos que también intervienen», afirma su creador. No en vano, se encargó un estudio técnico especializado para definir mejor qué medidas y materiales usar para la pieza. Entre otros cambios, se redujo en parte la altura del pedestal y se decidió que en lugar de usar acero se recurra al viroc, un material también resistente, pero menos pesado.

«Estoy muy contento, muy ilusionado con esta obra», confiesa Francisco Suárez, que ya tiene una larga trayectoria en escultura urbana, con una veintena de piezas instaladas, no solo en Canarias, sino también en otros países, como Noruega. Lo que hace singular a esta obra respecto al resto es su tamaño. Es, con diferencia, la mayor de cuantas tiene en la calle. Y también su abstracción geométrica, que es lo que centra sus trabajos de ahora.

El coste de la realización y montaje de la pieza ha sido financiado por Ecoaga con la colaboración del Ayuntamiento y asciende a 90.000 euros. Los operarios de Metalarinaga SL ultiman estos días la construcción del pedestal. La idea es que 'Entre todos' esté colocada a finales de septiembre.