No menos de 511 cabras campan en Tamadaba, Tauro, Inagua y El Nublo

En el último censo de ganado asilvestrado que el Cabildo hace cada año en esos cuatro espacios naturales protegidos del oeste fueron avistados 214 individuos en 48 observaciones diferentes realizadas por las dos personas que recorren los mismos 10 transectos de esos espacios. Esta vez los animales vistos eran 97 machos (45%), 80 hembras (37%), 34 juveniles (16%) y 3 individuos sin identificar (2%).

Extrapolando la cifra de ejemplares observados en cada área de muestreo recorrida a pie y con binoculares al sector de estudio y a la superficie real de esos cuatro espacios protegidos, que asciende a 39.162,90 de las 156.000 hectáreas de la isla, es como se estima que la población de ganado asilvestrado que ramonea a su antojo por ellos asciende a 511 individuos.

La población estimada en el censo de 2022 era de 425 ejemplares, la de 2021 ascendía a 492 cabezas y la de 2020, cuando se hizo el primer censo, se elevaba a 697 individuos entre los cuatro espacios, limítrofes entre sí y por los que esos animales transitan libremente. A esa lista de espacios protegidos hay que sumar la Reserva Natural Especial de Guguy, que también linda con varios de ellos y en la que también existe una población estable de cabras asilvestradas.

En todo caso la cifra de 511 ejemplares pululando por Tamadaba, Inagua, Tauro y El Nublo no deja de ser una estimación porque el método para calcular esa población no es, ni mucho menos, inefable. De hecho, la empresa que hizo el estudio entre enero y junio, Dracaena, apunta que «estos resultados se encuentran probablemente subestimados debido a la baja detectabilidad de los animales, motivada tanto por la propia orografía del espacio como por los hábitos de la especie».

Las cabras, recuerda siempre el informe, permanecen gran parte del tiempo a resguardo de cuevas y oquedades donde se hace imposible su detección por los observadores.

Además, los autores del censo desde 2020 señalan que este tamaño poblacional corresponde al área de estudio estimada, considerada representativa para los espacios seleccionados a excepción del Parque Rural del Nublo, precisamente el de mayor tamaño de los cuatro, con diferencia, que «se encuentra subrepresentado con un 15% del total de la superficie del espacio».

Por eso considera que la cifra poblacional obtenida «resultaría probablemente superior» si se pudieran ampliar los censos hasta cubrir una superficie representativa de la totalidad del Parque Rural, que mide 26.447,40 hectáreas, es decir, dos tercios de la superficie que suman los cuatro espacios.

En base a las observaciones durante el trabajo de campo, la estima poblacional más elevada corresponde al sector Degollada de Tasartico-Tasarte, con 99 animales estimados, seguido del sector de Degollada del Agujero-Casa Forestal de Pajonales, con 86 animales, y del sector San Pedro-Guayedra, con 85.

La zona con mayor densidad de observaciones dentro de los 91,06 kilómetros recorridos para muestras en un área de 6.657 hectáreas (ni una sexta parte de la superficie de los cuatro espacios) se encuentra entre Montaña de Las Brujas y Lina, seguida del entorno de Montaña Aslobas y Montaña de Berbique.

La población de cabras asilvestradas que refleja este censo no es la única que ramonea por espacios protegidos de la isla porque también hay ejemplares en la Reserva Natural Especial de Guguy (147 individuos según el último censo, de mayo) y varios más.

Su presencia en Guguy es incompatible con la declaración de ese territorio como Parque Nacional propuesta por el Cabildo. Además, la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo ha autorizado la realización de apañadas para su captura en la Reserva Natural Especial de Los Marteles, el Monumento Natural Riscos de Tirajana y el Parque Natural de Pilancones. Y en años anteriores también ha autorizado apañadas en el Monumento Natural de Amagro y el Paisaje Protegido de Pino Santo.