Gran Canaria es deliciosa

Nombrarlos a todos sí que sería complicado, pero en este resumen breve paseo iremos por restaurantes que combinan la clásica ejecución de los platos canarios más clásicos, donde la tradición y la herencia culinaria marca la diferencia, y por esos otros donde cocineros de talento han llevado a la gastronomía canaria un paso más allá, con creaciones originales e innovadoras que enriquecen aún más la oferta.

El Padrino. Es común encontrar este restaurante lleno hasta la bandera, sobre todo, durante los fines de semana, pero es que a poco que uno pruebe su gofio escaldado, el pescado fresco que ofrecen a diario, o sus papas arrugadas, acompañadas de ambos mojos, hacen que cuando un acude a El Padrino se sienta como en casa. Entre lo bien que se come, atendidos por un servicio rápido y mucho más que eficiente, la experiencia siempre es confortable y reconfortante. Lugar de cabecera para todos los que quieran conocer de cerca, a qué sabe Gran Canaria.

Ca'Manolo. Yendo hacia El Madroñal encontramos Ca'Manolo, lugar pintoresco y peculiar donde los haya, con lo mejorcito en materia de cochino negro que se trate en nuestra isla y con recetas conservadas y fieles a la historia y la tradición.Nos cuenta que sigue siendo de los pocos lugares en Gran Canaria donde podemos encontrar mojo cochino de verdad, pero, realmente, todo lo que sale de sus cocinas, sabe a genuino. Y ahora, que está más vigente que nunca hacer viajes a través de la nostalgia gustativa, en esta casa encontrará el mejor vagón en el que volver al sabor de nuestras costumbres.

Las Lagunetas. Con la filosofía que desde siempre los ha acompañado, en el Restaurante Bodegón Las Lagunetas siempre encontramos esos platos y elaboraciones con las que todos soñamos a menudo. Su cocina canaria, basada en la más estricta tradición, tiene un ejército de seguidores, tanto autóctonos como foráneos y es que, en uno de los epicentros de nuestra capital, como lo es el barrio de Triana, Las Lagunetas conforma ese oasis de cocina canaria, bien hecha, deliciosa y rebosante de tradición.

Bernardino. En el barrio de Gamonal Alto y con preciosas vistas sobre la Villa de Santa Brígida, encontramos este encantador y familiar restaurante. Cierto es que no solo ofrece en su carta comida canaria, pero hay platos muy nuestros que aquí, los preparan mejor que bien.

Su carne de cabra en salsa, de los mejores sitios donde puede comerse, las papas arrugadas y el mojo, casero y de película. Pero si hablamos de cocina canaria en particular, debemos darle un redoble a Restaurante Bernardino porque es de los pocos lugares en Gran Canaria donde se puede disfrutar de las famosas costillas, papas y piñas con su mojo verde de nuestra isla vecina. Si ese día tienen la suerte de encontrar garbanzas en su carta, no dejen de probarlas.

El Centro Guayadeque. Asiduo en nuestras listas, pero es que tampoco debe faltar en esta, porque la cocina canaria, sin duda, es su mejor especialidad. El recetario canario, de las siete islas, es la base de todas sus propuestas y todo lo que sale de sus cocinas, nos lleva a sabores y aromas que nos han acompañado desde siempre.

El cochino, el sancocho, el increíble mojo que acompaña a papas estupendamente arrugadas, su característico pan de millo, amasado y horneado solo para ellos más un sinfín de platos que seguro han formado parte de nuestras vidas, desde nuestra infancia.Además, tienen evento especial para celebrar el Día de Canarias con el súper pan con cochino negro canario a la sal y, les adelantamos, que será la mejor manera de celebrar este día.

Muxgo. Borja Marrero es uno de los cocineros con mayor talento y potencial del panorama nacional. En ese oasis llamado Muxgo, en el hotel sostenible Catalina Plaza, el grancanario ofrece una serie de menús donde el comensal puede comerse, literalmente, el territorio, siempre con la mirada puesta en su Tejeda del alma. La técnica que demuestra, junto al conocimiento y el relato, convierten a Muxgo en uno de los mejores restaurantes de la isla.

Tabaiba. Poco hay que decir de este pequeño restaurante que consiguió la primera estrella Michelin urbana de Las Palmas de Gran Canaria. Con Abraham Ortega al frente, la cocina canaria da un par de pasos más allá sin alejarse demasiado de la raíz y la nostalgia del sabor de siempre. Tabaiba es Canarias, pero lo es desde la visión de un joven y brillante chef que la interpreta a las mil maravillas.

Equilibrista 33. Carmelo Florido lleva muchos años interpretando como nadie todos los productos locales que la tierra y el mar le ofrecen. Con mucha técnica, cariño y pasión por lo cercano, Florido impulsa la gastronomía canaria de tal manera que todos los que allí van siempre salen gratamente sorprendidos de ese concepto tan personal y original. Es un equilibrio, obvio, entre los tradicional y la nueva cocina canaria. Un lujo.

Sorondongo. Con Richard Díaz a los mandos, este restaurante es una de las últimas incorporaciones al panorama gastronómico con claros guiños a la gastronomía canaria. Ganador del premio al mejor cocinero de Canarias en Gastrocanarias, el joven chef grancanario ha encontrado aquí su proyecto perfecto, creado desde cero por él y con toda la ilusión del mundo para poner en valor en lo que cree firmemente.

Cuernocabra. Con el sello de Safe Cruz (Gofio, una estrella Michelin), este divertidísimo local es una clara muestra de la versatilidad que ofrecen los platos de toda la vida. 'Canariedad máxima', de lo que presumen con orgullo, desde los vinos hasta el último plato, Cuernocabra es un local diferente a todo, y esa es su gran virtud. El manejo del producto para elaborar creativos platos es brutal, y el resultado es sensacional. Un valor añadido que nunca falla.