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Torreta a medias en Tesjuate. JAVIER MELIÁN / ACFI PRESS
Las torretas de alta tensión vuelven a amenazar el paisaje entre Gran Tarajal y Puerto del Rosario

Las torretas de alta tensión vuelven a amenazar el paisaje entre Gran Tarajal y Puerto del Rosario

El Gobierno canario decreta la reanudación de la obra de instalación de 102 apoyos y la modificación del PIOF y PGO de dos municipios

Catalina García

Puerto del Rosario

Viernes, 25 de junio 2021, 01:00

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Cuatro años después de que el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) paralizara las obras de las torretas de alta tensión en el tramo entre Gran Tarajal y Puerto del Rosario por su impacto paisajístico, la Dirección General de Energía del Gobierno de Canarias decreta la reanudación de las obras de la línea de transporte a 132 kilovoltios y la nueva subestación de Gran Tarajal. El decreto también inicia el procedimiento de modificación del PIOF y de los PGO de Antigua y Puerto del Rosario, planeamientos afectados por las torretas.

El tramo de la línea de transporte eléctrico del centro de Fuerteventura a 132 kilovoltios atraviesa tres municipios, Tuineje, Antigua y Puerto del Rosario, en sus zonas con más llanuras y planicies. Este tramo de la nueva red, paralizado por el TSJC en enero de 2017 a instancias del Cabildo de Fuerteventura, cuenta sin embargo con Declaración de Impacto Ecológico condicionada concedida en 2013 por la Cotmac. También con la declaración de interés general otorgada en 2013 por el Gobierno canario en aras de garantizar el suministro de energía eléctrica.

La sentencia de la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJC de 2018 fue ratificada por el Tribunal Supremo en junio de 2019 al tumbar el recurso presentado por Red Eléctrica de España.

El tramo Gran Tarajal-Puerto del Rosario prevé la colocación de 102 torretas eléctricas de alta tensión, mientras que el tramo norte, de la capital a Corralejo, comprende 83 apoyos que están terminados desde hace años, incluyendo la nueva subestación situada en los alrededores de la Cuesta de Perico. La paralización del TSJC nunca afectó al tramo norte, ni tampoco a la subestación de la capital.

En su rechazo a la nueva línea de alta tensión a 132 kilovoltios, el Cabildo se hizo eco del malestar ciudadanos a las nuevas torretas. Cuatro años más tarde de aquella paralización, los enemigos que acechan al paisaje majorero se han multiplicado en forma de parques solares y eólicos.

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