Canarias se encuentra en transición hacia un futuro sostenible

La irrupción hace un año de la covid-19 ha sumido a Europa en una de las mayores crisis socioeconómicas que ha atravesado el continente. Para superarla, la Unión ha trazado una hoja de ruta cuyo pilar fundamental es el impulso a la transición energética. Europa va a concentrar sus esfuerzos y gran parte de su plan inversor en la plena transformación del modelo energético hacia uno descarbonizado.

Pero para que este camino se complete será imprescindible la participación de los territorios insulares. La transición energética ya se ha iniciado en ellos, aunque el proceso no está exento de retos. Si bien las islas cuentan con un incuestionable potencial en energías verdes, también presentan sistemas eléctricos de menor tamaño y poco interconectados.

Canarias lleva años apostando por la transformación de su modelo energético aprovechando su riqueza en materias primas como el sol y el viento. En 2020, las renovables alcanzaron la mayor cuota de generación desde que hay registros: generaron el 17,5 % del total de la energía eléctrica de la región. Así se desprende del 'Avance del Informe del sistema eléctrico español' presentado recientemente por Red Eléctrica de España. Esta publicación también destaca que las energías verdes ya suponen casi el 21% de total de la potencia instalada en Canarias.

Junto con el impulso renovable, el archipiélago sigue trabajando en diferentes líneas de acción imprescindibles para transitar con éxito hacia un futuro sostenible. En la actualidad hay varios proyectos de interconexiones submarinas que dotarán a los territorios de sistemas eléctricos más robustos y verdes. Ya han dado comienzo las obras del nuevo enlace entre Lanzarote y Fuerteventura y, además, Red Eléctrica presentó hace un mes el proyecto de interconexión entre Tenerife y La Gomera, que unirá los sistemas de ambos territorios para crear uno de mayor tamaño y más resiliente.

Otra de las necesidades más acuciantes en las islas es el fomento e implantación de tecnologías de almacenamiento energético. Canarias, en la actualidad, cuenta con una de las iniciativas más destacadas a nivel europeo. Se trata de la central hidroeléctrica de bombeo reversible de Chira-Soria. Red Eléctrica ha diseñado esta infraestructura para que sea un instrumento de almacenamiento masivo y al servicio de la operación del sistema.

Entre sus principales beneficios, la central incrementará la integración de energías renovables al disponer de una instalación esencial para aprovechar los excedentes. De esta manera, la central aumentará en 2026 un 37 % la producción renovable en relación con los datos de generación sin la instalación, elevando hasta el 51 % la cobertura media anual de la demanda de electricidad con generación verde.

El proyecto de Chira-Soria es una de las principales iniciativas del plan estratégico que Red Eléctrica recientemente ha presentado para los próximos cinco años. En concreto, la compañía invertirá 411 millones de euros en hacer posible esta central y otra infraestructura de almacenamiento basado en bombeo en Tenerife que actualmente está en fase de estudio. Esta cifra se enmarca en un contingente de 3.300 millones que la compañía destinará a una serie de actuaciones para hacer posible la transición energética en España.

De estos 3.300 millones de euros, además de lo destinado a almacenamiento, la compañía invertirá en todo el territorio nacional 2.846 millones de euros en el refuerzo de la red de transporte y 92 millones para la incorporación de herramientas para la operación del sistema, cada vez más compleja e integrada en Europa.

Estas inversiones, asegura la compañía, tendrán un efecto multiplicador sobre la economía nacional, ya que generarán actividad a suministradores y servicios locales y eso permitirá fortalecer el tejido industrial de las regiones.