Borrar
Vea la portada de CANARIAS7 de este viernes 19 de abril
Pruebe a trabajar con música

Pruebe a trabajar con música

Varios estudios confirman sus beneficios. Eso sí, no vale cualquier melodía, debe elegir sus canciones favoritas

Jueves, 15 de octubre 2020

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

¿Es usted de los que se pone música para trabajar o de los que, por el contrario, es incapaz de concentrarse con una melodía de fondo? Si es de los primeros, debe saber que hay varios estudios que demuestran las ventajas de escuchar música mientras escribe un informe, vende una camisa o rellena formularios. Parece ser que los sonidos melódicos ayudan a motivar la secreción de dopamina en el área de recompensas del cerebro, lo que en la práctica se traduce en un aumento de la productividad y la autoestima del empleado.

Un experimento realizado hace unos años en Canadá para comprobar si la música tiene algún efecto sobre los trabajadores, demostró que los empleados que escuchaban el hilo musical durante su jornada eran hasta un 20% más rápidos a la hora de hacer sus tareas, mientras que otro estudio más reciente liderado por la universidad estadounidense de Maryland ha ido un paso más allá. Además de ratificar que aumenta la productividad, el informe también certifica que cuando la música se escucha de manera colectiva «aumenta la empatía, el sentido de la colaboración y la comunicación entre compañeros». Ahí es nada.

Pero no todo es blanco o negro. El estudio más completo realizado hasta el momento sobre este fenómeno mantiene que efectivamente la música puede ayudar a conseguir mejores resultados en entornos profesionales, pero admite que no funciona con todos los trabajadores y solo lo hace si se cumplen las condiciones adecuadas. «No vale con escuchar música de cualquier manera. Para que tengo un efecto favorable, tiene que gustarle al empleado», precisa Teresa Lesiuk, autora del estudio 'Los efectos de la música sobre el rendimiento en el trabajo'. Es decir, no se trata de poner una melodía de fondo en la oficina para mejorar el ambiente y aumentar la productividad sino de que cada empleado tenga la posibilidad de escuchar las canciones que le apetecen en cada momento.

En cualquier caso, la investigadora insiste en que no todas las personas reaccionan igual ante la música, por lo que en algunos casos su escucha puede llegar a provocar el efecto contrario. «Hay gente que directamente no es más productiva en un ambiente en el que suena la música. Así de simple», coinciden los expertos. «También se debe tener en cuenta que no todos los puestos de trabajo son iguales en este sentido. Por ejemplo, no deben escuchar música aquellas personas que desempeñan determinadas profesiones de riesgo en las que, además de tener que estar concentrados, necesitan disponer del oído a pleno rendimiento para evitar accidentes», explican en el departamento de Organización de Empresas de la Universidad de Alicante, partidarios del uso de la música «como elemento ambiental, previa selección y consulta con los grupos de trabajo». «No siempre es fácil disponer del ambiente óptimo de trabajo, así que dejar que los trabajadores escuchen su música para concentrarse y trabajar mejor no es algo descabellado. Sea a nivel individual –que cada uno se ponga lo que quiera–, o sea a través del hilo musical –no será fácil combinar los gustos de todo un equipo–, no está de más al menos intentarlo y darle una oportunidad a la música», plantean.

Entre sus beneficios, los expertos en musicoterapia destacan cinco apartados.

Mejora la concentración: escuchar música ayuda a mejorar nuestro enfoque. «Se puede elegir una pieza instrumental o de patrones repetitivos, así el cerebro podrá desarrollar con facilidad secuencias de acciones que mejorarán el rendimiento».

Incrementa la creatividad e imaginación: si el trabajo requiere del cerebro para crear nuevas ideas, la música será tu mejora amiga, «ya que está demostrado que incrementa nuestra conexión con la generación de conceptos creando la atmósfera perfecta para dejar volar la imaginación y lograr resultados más creativos, además de ayudar a resolver problemas con mayor facilidad».

Aumenta la motivación: hay momentos mientras se trabaja en los que se puede caer en el aburrimiento, tensión «o simplemente te sientes abrumado. Si cambias el ritmo de la música por tus canciones favoritas, dedicando de 5 a 10 minutos, podrás dispersar tu mente y retomar el entusiasmo por lo que estabas haciendo».

Mejora la frecuencia cardíaca: cuando una persona se somete a a actividades que generan mucho estrés, «una manera de retomar el camino es usando música instrumental de ritmo lento. Concéntrate unos minutos en la pieza musical y haz respiraciones profundas, esto te ayudará a normalizar tu frecuencia cardíaca y llegar a un estado mental ideal para retomar tu trabajo con cero estrés».

Se aprende mejor y más rápido: «si estás buscando aprender cosas nuevas para mejorar tus habilidades en el trabajo, escuchar música te ayudará a retener información con éxito permitiendo a tu cerebro almacenar nuevos conocimientos».

Una canción para cada necesidad

  • 'Weightless' de Marconi Union (relajación) Este tema de 8 minutos de duración es considerada la canción más relajante del mundo, tanto que no la recomiendan escuchar si conduces porque te puedes dormir. El trío británico empleó la ayuda de neurólogos y terapeutas para diseñar su partitura. Tanto la melodía como los ritmos y los bajos contribuyen a que desciendan la presión sanguínea, el ritmo cardíaco y los niveles de cortisol.

  • 'Viva la vida' de Cold Play (motivación) Para el psicólogo musical David M. Greenberg, profesor en las universidades de Cambridge y Nueva York, esta canción, considerada todo un himno generacional, es la ideal para levantar el ánimo seguida de 'Downtown' de Macklemore y Ryan Lewis; 'Lovely Day' de Bill Withers y 'Confident' de Demi Lovato.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios