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«La Medicina Estética se enfoca desde la autoestima, y nunca desde la vanidad»

«La Medicina Estética se enfoca desde la autoestima, y nunca desde la vanidad»

De una marcada vocación científica y también artística, Jesús Chicón es uno de los doctores españoles con mayor proyección internacional y su trabajo le ha convertido en un referente mundial en el uso de técnicas dentro de la especialidad de la medicina estética e incide en que lo que “da belleza y luz a un rostro son los ojos, que son el espejo del alma”. Palabra de profesional.

C.J. / Las Palmas de Gran Canaria

Jueves, 1 de enero 1970

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¿La medicina estética es un arte?

— Qué buena pregunta. Efectivamente es uno de los campos donde la ciencia médica es más arte. Aunque hay una serie de protocolos para cada técnica, es precisamente en el toque personal del doctor donde reside la magia de que un resultado que ha sido bien ejecutado llegue a ser sublime. Yo digo muchas veces que es como la cocina, aunque la receta sea la misma, el toque del cocinero es lo que le da el sabor que lo distingue de otros. Es en lo no escrito donde está el secreto.

Qué opina como profesional, ¿mantenerse joven a toda costa o con ‘brillo’?

— Mantenerse joven a toda costa no es medicina estética, eso es vanidad. La medicina estética se enfoca desde la autoestima, que es lo opuesto. La vanidad es buscar en el físico la perfección que te da seguridad en ti mismo. La autoestima es que te quieres tanto y estás tan bien contigo mismo, que te gustaría mejorar, de manera natural, para que tu aspecto exterior refleje lo bien que te sientes por dentro. Y, cómo no, desde ese mismo lugar, también puedes solucionar aquello que consideras un problema estético para que no acabe minando tu autoestima.

Estéticamente, ¿qué es lo que más ‘apaga’ a una persona?

— La falta de ilusión. La ausencia de luz interior. En ocasiones hacemos trabajos perfectamente ejecutados en pacientes que no dan el resultado esperado. Suele tratarse de pacientes que están tristes. La medicina estética es un trabajo de equipo: los médicos sacamos a la luz la fuerza interior que el paso de los años va camuflando. Pero si no existe previamente esa energía interna, nosotros no la podemos crear.

Si tuviera que quedarse con uno solo, ¿en qué rasgo facial diría usted que reside la belleza humana?

— En la mirada. Se dice que los ojos son el espejo del alma. ¡Y es así! Lo que da belleza y luz a un rostro son los ojos. La sensualidad la dan los labios.

Usted incide en que le gusta trabajar en la Medicina Estética desde la autoestima y no desde la vanidad. ¿Asistimos a la socialización de su especialidad o a la esclavitud de la imagen?

— A ambas cosas, siendo la primera la consecuencia de la segunda. Estamos extremadamente expuestos a nuestra propia imagen: miles de selfies, fotos de grupo, vídeos en redes sociales... Además, las imágenes dan una objetividad que el espejo no da. El espejo es nuestro amigo, ¡la foto no! Así aparece una demanda creciente de tratamientos de estética: “me hice ayer una foto y me vi una arruga que hasta ahora no tenía. ¿Me la puede quitar doctor?”. Esto es habitual en nuestras consultas.

¿Cómo es una consulta con usted, qué cree que le diferencia de otros profesionales? ¿Cuál suele ser el mayor temor del paciente?

— Una consulta conmigo es como charlar con un amigo que sabe más del tema a tratar. Lo más importante para mí es la información. La información sobre la medicina estética está llena de bulos y de leyendas urbanas. Yo siempre digo la verdad, aunque a veces no sea lo que quiere oír el paciente. Los mayores temores de los pacientes son el dolor y la naturalidad del resultado.

¿Hace un plan de acción a largo plazo; incluye tratamientos con aparatología como la radiofrecuencia u otros?

— Yo siempre soy de planes a medio y largo plazo. En mi vida en general y en mi vida profesional. Es como reconstruir una obra de arte, requiere su tiempo. El cuerpo humano y la naturaleza humana son bellos en sí mismos. Se trata de realzar esa belleza de manera progresiva y natural. Por supuesto que en esa estrategia utilizamos todos los recursos que resulten adecuados para el paciente.

¿Hay una estación del año recomendable para cada tratamiento? De forma genérica, ¿qué recomendaría para los meses más fríos como enero o febrero?

— Los meses de enero y febrero son ideales para cuidar la piel al haber menos riesgo de exposición solar intensa. Aprovechamos estos meses para hacer tratamientos de peelings, vitaminas o plasma que mejoran aspectos como las manchas, arrugas finas, poros dilatados... También es una época ideal para tratar las pequeñas arañas vasculares de las piernas.

Usted es uno de los doctores españoles con mayor proyección internacional, habitualmente imparte seminarios y pasa consultas en Argentina, Colombia, Chile o Portugal además de formar a numerosos profesionales, ¿qué deberíamos ‘importar’ tanto desde el punto de vista del paciente como desde el profesional?

— ¡La naturalidad! En la mayoría de los países a los que viajo se ve con total naturalidad que las personas acudan a sus sesiones de medicina estética. En España se sigue haciendo, aunque cada vez menos, un juicio ético de la estética. De hecho, hay muchos pacientes que ocultan a su entorno que se hacen tratamientos porque prefieren no sentirse juzgados. Esperemos que en el nuevo año dejemos este y otros juicios sin sentido fuera de nuestras vidas

El Dr. Chicón, referente mundial en el uso de técnicas de Medicina Estética
El Dr. Chicón, referente mundial en el uso de técnicas de Medicina Estética

Todo un referente mundial muy viajero.

El Doctor Jesús Chicón, Licenciado en Medicina y Cirugía, y Máster en Medicina Estética es, además, Experto Europeo en Gestión de Calidad y Experto Europeo en Investigación, Desarrollo e Innovación por la Agencia Española de Calidad. Con más de quince años en la Medicina Estética, lleva diez de ellos pasando consulta junto a su equipo en la Clínica Icamen de Las Palmas de Gran Canaria a donde acude mensualmente al igual que a otros centros de Madrid, Zaragoza, Chile, Argentina, Colombia o Portugal.

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