Borrar
Vea la portada de CANARIAS7 de este martes 19 de marzo
Finaliza la experimentación clínica de la primera vacuna rusa contra el coronavirus

Finaliza la experimentación clínica de la primera vacuna rusa contra el coronavirus

Las cobayas humanas han sido militares rusos de ambos sexos que han participado en las pruebas por iniciativa propia.

Rafael M. Mañueco

Jueves, 1 de enero 1970

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La Universidad Séchenovski de Moscú anunció ayer que la experimentación clínica de la primera vacuna rusa contra el coronavirus ha finalizado y ha sido todo un éxito. Las cobayas humanas han sido militares rusos de ambos sexos que han participado en las pruebas por iniciativa propia. Así al menos lo declaró hace mes y medio el Ministerio de Defensa ruso.

El primer grupo de voluntarios será dado de alta el miércoles y el segundo, el 20 de julio, declaró a la agencia RIA-Nóvosti Vadim Tarásov, director del Instituto de Medicina Traslacional y Biotecnología de la Universidad Séchenovski. A partir de ahí y puesto que el fármaco ha demostrado su capacidad de crear inmunidad sin efectos secundarios peligrosos para la salud, la siguiente fase consistirá en acometer su producción a gran escala.

Determinar que la vacuna es segura para los usuarios era el principal objetivo de la experimentación, ya que en los ensayos previos con animales ya estableció que provoca la aparición de anticuerpos contra el coronavirus de Wuhán. «La Universidad Séchenovski ha completado con éxito las pruebas en voluntarios de la primera vacuna del mundo contra el coronavirus», manifestó Tarásov. El medicamento fue desarrollado por el Centro de Investigación Nacional de Epidemiología y Microbiología Gamaléi de Moscú (NITsEM en sus siglas en ruso) en colaboración con el Ministerio de Defensa.

Tarásov explicó que los voluntarios estuvieron aislados durante un largo período de tiempo, tuvieron contactos limitados con el mundo exterior, incluso antes del inicio de las pruebas, para excluir la infección por coronavirus. Este confinamiento prolongado, comentó el responsable universitario, «afectó el estado psicológico de los participantes en la prueba». Durante el estudio hubo conflictos, aumentó el estrés emocional y hubo que recurrir a psicólogos para reducir la tensión surgida. Ahora, los dos grupos volverán a la vida normal en los próximos días 15 y 20 de julio, aunque tendrán que seguir sometiéndose a exámenes médicos para evaluar cómo se comporta su sistema inmunológico.

Por su parte, el director del Instituto de Parasitología Médica y Enfermedades Tropicales y de Transmisión Vectorial de la Universidad Séchenovski, Alexánder Lukáshev, subrayó a RIA-Nóvosti que el objetivo del actual estudio clínico era «comprobar la seguridad de la vacuna para la salud humana». Según sus palabras, «los voluntarios fueron divididos en dos grupos: el primero recibió una dosis de la vacuna, el segundo dos».

Lukáshev asegura que «salvo un aumento en la temperatura corporal en los primeros días después de la vacunación, los participantes en el experimento no mostraron ninguna reacción negativa, todos se sienten bien». El Ministerio de Sanidad ruso informó con anterioridad que los ensayos clínicos de la vacuna comenzaron el pasado 18 de junio. Unos días después, el director del Centro Gamaléi, Alexánder Guíntsburg, aseguró que existe «una alta probabilidad de que el paciente tratado con esta vacuna desarrolle inmunidad contra el coronavirus para al menos dos años y puede que para más tiempo».

En una entrevista al diario castrense ruso Krásnaya Zvezdá (Estrella Roja), Guíntsburg dijo también, en relación con la cantidad necesaria del preparado médico a fin de proceder a una vacunación masiva de la población, que harán falta «unos setenta millones de dosis», cifra que exigirá una importante capacidad productiva de la industria farmacéutica rusa. La viceprimera ministra, Tatiana Gólikova sostiene que, tras las pruebas clínicas y el registro estatal en agosto, la producción de la vacuna arrancará en septiembre.

En Rusia este año, se espera la aparición de vacunas de tres instituciones, además de Gamaléi, trabajan en ello también el Centro Científico Estatal de Novosibirsk Véktor y el Instituto de Vacunas y Sueros FMBA de San Petersburgo.

Desde ayer sábado, en Rusia se han registrado 6.615 nuevos casos de coronavirus, cuatro más que el día anterior. El total desde el comienzo de la pandemia se eleva así a 727.162 infectados, de los que se han curado 501.061.Se han contabilizado además 130 nuevas muertes, 58 menos que el día anterior, y el total se sitúa en 11.335 fallecimientos. Sigue habiendo, por tanto, 214.766 casos activos.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios