«A veces la cirugía cardíaca es el primer recurso del paciente»

— La enfermedad coronaria repunta en Canarias. ¿A qué es debido? ¿Está relacionado con la alta prevalencia de la diabetes en el Archipiélago?

— Hay razones, en el ámbito alimentario, como son el uso frecuente de féculas (hidratos de carbono) y su relación con la obesidad. La población joven lo tiene más asimilado. Es una maravilla ver a tanta gente haciendo ejercicio, corriendo o caminando por la playa de Las Canteras. Pero los mayores no se cuidan tanto a la hora de comer. La dieta y los hábitos de vida saludables son fundamentales para mantener una buena salud coronaria. Sin embargo, sigue aumentando el número de fumadores, y más, entre las mujeres que entre los hombres, y el tabaquismo es un factor de riesgo importante. Por otro lado, Canarias cuenta con una población flotante multiétnica con hábitos muy diversos entre ellos, y buena parte de esa población foránea son personas mayores que recalan en nuestras islas por el buen tiempo en invierno. A más edad, mayores probabilidades de padecer una enfermedad coronaria, de ahí, que se explique esa mayor prevalencia en las islas.

— ¿Es la cirugía cardíaca el con el que cuenta el paciente para tratar sus problemas cardiovasculares o enfermedad enfermedad coronarias?

— Somos un recurso, es cierto, y como tal es un arma terapéutica que, en algunos casos puede ser la última, pero en otros muchos la primera. Acudir al cirujano cardiovascular cuando las cosas tienen difícil arreglo es siempre peor que haber acudido cuando podía haberse hecho algo mucho antes. La desinformación y quizás el miedo pueden hacer que se posponga esa visita que debería haber sido la primera. En la actualidad, las tasas de morbilidad en cirugía cardíaca son muy bajas. Yo llevo desde el año 1981 operando a enfermos de corazón y los resultados de esas operaciones son hoy increíbles. Antes no se operaba a alguien de más de 75 años porque se pensaba que podía morir en la mesa de operaciones. La cirugía cardiovascular ha desmontado todos esos mitos y aún siendo utilizados como el último recurso, como mucha gente piensa, damos soluciones con tasas de riesgo suficientemente buenas. Canarias puede dar y da una respuesta de gran nivel y capacidad a las enfermedades coronarias...

— ¿Cree que les falta información a los pacientes?

— En los años de experiencia que tengo te vas dando cuenta de que la población tiene más información sobre las posibilidades de la cirugía cardíaca y, por lo tanto, conoce los riesgos reales de la misma. Lo preocupante sería lo contrario, que se tuviera una fe ciega en la tecnología y que se pensara que ésta va a resolver todos nuestros problemas de salud. Yo me alegro porque lo que percibo es que la sociedad canaria respeta y confía en los médicos. Eso me llena de orgullo porque también siento que el enfermo de Canarias es una persona que está bien informada y que tiene la cultura suficiente para comprender bien lo que le ocurre. Además, Canarias puede presumir de contar en la medicina cardíaca con la mejor dotación tecnológica y humana. En Hospitales San Roque me he encontrado un centro con excelentes servicios, con alta dotación técnica y con profesionales y especialistas muy cualificados. Precisamente estas virtudes podrían ser aprovechadas por para impulsar el desarrollo de la región, pues las islas son un portaaviones en medio del Atlántico que pueden brindar sus servicios médicos tanto a África como al norte de Europa a través del turismo que nos visita. Si los médicos hacemos las cosas bien generamos una serie de recursos que puede aprovechar la sociedad canaria.

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