El Papa renuncia a leer un discurso ante los rabinos: «Hoy no tengo buena salud»

Después de verse con los rabinos europeos, mantuvo una audiencia con un grupo de voluntarios de una asociación caritativa siciliana, a los que sí que dedicó un discurso leído, y se reunió durante unos 40 minutos con el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés, quien no percibió que el Papa estuviera particularmente enfermo. «La conversación ha transcurrido con total normalidad. Estoy convencido de que se pudo tratar de una pequeña indisposición y que no es nada grave», señaló Aragonés.

Ante la inquietud que generaron las palabras de Francisco ante la delegación de rabinos, el portavoz vaticano, Matteo Bruni, aclaró en una nota que el Pontífice sólo había sentido los efectos de «un poco de resfriado» en una larga jornada de audiencias. «Deseaba saludar individualmente a los rabinos europeos y por eso entregó el discurso. Por otro lado, las actividades del Papa prosiguen regularmente», explicó Bruni. Además del resto de audiencias de la mañana, en la agenda de Jorge Mario Bergoglio de este lunes destaca el encuentro que tiene previsto mantener esta tarde en el Aula Pablo VI con alrededor de 7.000 niños provenientes de 84 países distintos.

Tras sus hospitalizaciones en marzo y junio de este año, Francisco ha mostrado que está plenamente recuperado de salud, al viajar a Portugal, Mongolia y Marsella en los últimos meses. Durante el mes de octubre ha afrontado el maratón de reuniones del Sínodo sobre la Sinodalidad, en el que representantes de toda la Iglesia católica han debatido sobre el futuro de la comunidad católica, mientras que a principios de diciembre tiene previsto desplazarse a Dubái para participar en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2023 (COP28).