Arcuri abandona con su hijo los juzgados escoltado por la Policía tras la entrega del menor por Juana Rivas
La querella presentada por el hermano por supuestas coacciones se ha tramitado como denuncia y no paraliza el intercambio del menor
Pilar García-Trevijano y Carlos Morán
Granada
Viernes, 25 de julio 2025, 08:31
Francesco Arcuri ha recuperado a su hijo. En torno a las 12.15 de la tarde, el coche de la expareja de Juana Rivas abandonaba los juzgados de La Caleta con el menor, de once años. Los agentes cambiaron el sentido de la circulación y escoltaron el vehículo con un furgón de la Policía Nacional y un coche de la Policía Local de Granada. Padre e hijo ponen rumbo directo al aeropuerto para abandonar España en dirección a Cerdeña para así volver a Cagliari, su localidad de residencia.
Los abogados y los padres del hijo menor de Juanas Rivas acudieron con media hora de diferencia a los juzgados de La Caleta donde recibieron instrucciones de la jueza de Primera Instancia número 3, del juzgado de familia, para proceder a la entrega.
Para evitar una «sobreexposición innecesaria» del menor a raíz del último intento de intercambio frustrado, la jueza ordenó que se hiciera en la más estricta intimidad y que solo hubiera un acompañante, los abogados, por cada uno de los progenitores. Juana Rivas llegó a las 9.05 horas de la mañana y entró junto a su abogado, Juan de Dios Ramírez, en coche. A las 09.35 hizo lo propio Francesco Arcuri, junto su abogado, Enrique Zambrano. La jueza dispuso que la entrada se haría directamente a través del garaje del complejo judicial «sin interrupciones ni paradas previas innecesarias», destaca una providencia del juzgado de familia en poder de este medio. De hecho, el tribunal tenía monotorizados los vehículos que llevarían cada uno de los dos padres.
El encuentro del padre con su hijo se produjo en la Sala Gesell del complejo judicial de La Caleta en presencia del Equipo Técnico compuesto por personas técnicas, psicólogas y trabajadoras sociales designadas al efecto para llevar a cabo el trámite de entrega en las mejores condiciones posibles. El acto se ha realizado preservando en todo momento la privacidad del menor y sus progenitores y sin interferencias de ningún otro tipo, evitando al mismo tiempo más exposiciones públicas.
El juzgado tuvo que pedir a Rivas que llevara el pasaporte y la maleta de su hijo
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia, antes de proceder a la entrega del menor, la magistrada de Primera Instancia ha estado a la espera de que la magistrada del Juzgado de Instrucción número 9 de Granada resolviera las medidas cautelares solicitadas en la querella presentada por supuestas coacciones del hijo de mayor edad de Francesco Arcuri y Juana Rivas contra su padre en la que se requería la suspensión de la orden de entrega de su hermano menor. La titular del Juzgado de Instrucción rechazó con el apoyo de la Fiscalía la adopción de las citadas medidas cautelares, lo que posibilitaba la finalización del proceso.
Rechazo y despedida
Mientras se estuvo a la espera de la decisión del Juzgado de Instrucción número 9, la madre permaneció en compañía de su hijo y con el equipo de psicólogos. Cuando se confirmó el rechazo a las medidas cautelares, la madre se despidió de su hijo y abandonó las dependencias judiciales sobre las 11.00 horas de la mañana.
La jueza, que pidió un informe al personal del Punto de Encuentro Familiar donde se trató de realizar la primera entrega del menor, en el auto que ordenaba el cumplimiento de la directriz italiana para la devolución del niño apuntaba en relación a los incidentes que el acceso al punto de encuentro el martes se realizó por la progenitora sin ir acompañada del menor, y al preguntárselo por él, se empleó la expresión «ella ha venido y ya ha cumplido». Sin embargo, el menor no accedió al servicio hasta casi 20 minutos después junto con su hermano mayor y una psicóloga privada que manifestó haber trabajado con ambos, influyendo el excesivo acompañamiento de éste en la frustrada entrega. De hecho, la jueza hace hincapié en que desde el punto de encuentro familiar le trasladaron que no dejaban al menor a solas porque, «literalmente», decían que lo convencerían para que se vaya.
Como no se hacía constar en el informe de los trabajadores si en la frustrada entrega el niño llevaba consigo sus pertenencias, la jueza tuvo que requerir a Juana Rivas preparara una maleta y el pasaporte del menor, dado que en las imágenes emitidas por los medios de comunicación el menor no llevaba pertenencias. La titular del juzgado de familia remachaba y recordaba que la ejecución de la orden era inevitable. Demandó el compromiso de que Juana Rivas acudiría a la entrega.
A las afueras de La Caleta esperaba Serlapo Bardi, abogado de la causa italiana de Arcuri. El abogado italiano, que ha manifestado que no habla bien español, ha explicado que se muestran tranquilos y que espera que su cliente se reúna hoy con su hijo. Ayer, el equipo de Juana Rivas agotó las vías que le quedaban para tratar de impedir el reintegro del menor a su padre, Francesco Arcuri. El Ministerio de Justicia apuntó que no había nada que se pudiera hacer para suspender la orden, ya que son los juzgados los únicos competentes. Por otra parte, la Audiencia Provincial de Granada ha ordenado investigar a la madre de Maracena por sustracción de menores, al considerar que podría haber provocado la puesta en marcha de la medida cautelar que mantuvo a su niño en España tras concluir el periodo vacacional de Navidad.
Comunicado del TSJA
El Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada ha culminado hoy, viernes 25 de julio, la entrega del hijo menor de edad de Juana R. G. a su padre Francesco A. en el Edificio Judicial de La Caleta tal como había establecido la magistrada de Granada en el trámite de ejecución del Decreto de 18 de febrero del Tribunal de Apelación de Cagliari (Cerdeña-Italia).
Antes de proceder a la entrega del menor, la magistrada de Primera Instancia ha estado a la espera de que la magistrada del Juzgado de Instrucción número 9 de Granada resolviera las medidas cautelares solicitadas en la querella presentada por el hijo de mayor edad de Francesco A., Gabriel A. R., contra su padre en la que se requería la suspensión de la orden de entrega de su hermano menor D. La titular del Juzgado de Instrucción rechazó con el apoyo de la Fiscalía la adopción de las citadas medidas cautelares, lo que posibilitaba la finalización del proceso.
Mientras se estuvo a la espera de la decisión del Juzgado de Instrucción número 9, la madre permaneció en compañía de su hijo y con el equipo de psicólogos. Cuando se confirmó el rechazo a las medidas cautelares, la madre se despidió de su hijo y abandonó las dependencias judiciales.
El encuentro del padre con su hijo se produjo pocos minutos después en la Sala Gesell del complejo judicial de La Caleta en presencia del Equipo Técnico compuesto por personas técnicas, psicólogas y trabajadoras sociales designadas al efecto para llevar a cabo el trámite de entrega en las mejores condiciones posibles. El acto se ha realizado preservando en todo momento la privacidad del menor y sus progenitores y sin interferencias de ningún otro tipo, evitando al mismo tiempo más exposiciones públicas.
Con el fin de que se conozca todo el proceso de entrega del menor dispuesto por el Juzgado de Primera Instancia número 3 tras los acontecimientos vividos el pasado martes frente y dentro del Punto de Encuentro Familiar, facilitamos el auto de medidas ejecutivas dictado el día 23 de julio y la posterior providencia de fecha 25 de julio que han delimitado el trámite y han garantizado su ejecución en las mejores condiciones posibles.