«El Papa Francisco tenía a Canarias en su corazón y en su agenda»

La Diócesis de Canarias ha recibido con «gran dolor y tristeza» la noticia del fallecimiento del Papa Francisco I en la mañana de este lunes. El obispo de Canarias, José Mazuelos, puso en valor su amor por los más desfavorecidos, entre ellos los migrantes, por los que siempre mostró interés y no escondió su deseo de visitar las islas para conocer de primera mano este drama humanitario.

«Él no vino a Canarias por la enfermedad, si no, hubiera venido, lo manifestó varias veces al presidente del Gobierno regional», apuntó a este respecto Mazuelos, quien estuvo acompañado por el obispo auxiliar, Cristóbal Déniz, en su comparecencia ante los medios, con motivo del deceso del pontífice.

Precisamente, Déniz mantuvo un encuentro con el santo padre el pasado enero, junto a otras personas, en el que este le comentó abiertamente: «'Quiero ir a Canarias', me lo dijo sin yo preguntarle. Nos tenía en el corazón y nos tenía en su agenda». El obispo de Roma aprovechó la ocasión para felicitar al archipiélago «como pueblo, como sociedad, como Iglesia», por su «cariño y responsabilidad con las personas migrantes».

Mazuelos confía en que el sucesor de Jorge Mario Bergoglio mantenga la inmigración entre sus prioridades, ya que «es uno de los grandes desafíos que tiene la sociedad europea, el mundo globalizado, y no va a acabar mientras haya guerras, explotaciones y pueblos en desarrollo». Puso el foco en Estados Unidos y Latinoamérica, otros rincones del mundo donde el pulso de la crisis migratoria es fuerte.

«No estamos a favor de una inmigración ilegal, no podemos estar de acuerdo con que montón de vidas mueran en el Atlántico o en el Sáhara. Hay que regular», quiso aclarar el obispo de Canarias, quien apuesta por que se dé un «desarrollo en el origen» y por «buscar corredores de hospitalidad».

En este sentido, adelantó un proyecto formativo en Senegal, «de cara a formar a la gente y que vengan con papeles y con trabajo». Si bien, enfatizó que no se puede «explotar los recursos minerales» en algunos de los países de procedencia de muchos migrantes y luego pretender que «vivan del aire».

Sobre Francisco, Mazuelos destacó que «fue un Papa valiente, que se ha lanzado a tantas cosas... Ser jesuita también tiene su punto». Resaltó especialmente la «dimensión pastoral personalizada» que defendía, por ejemplo, en el matrimonio, su cercanía, su salida a las periferias, su fraternidad frente al «individualismo que se va imponiendo y que demuestra que todos somos hermanos, con un padre común», o su conciencia del cambio climático. «Ojalá que esas enseñanzas de tanta profundidad puedan ser más conocidas y apreciadas, pues son de una gran riqueza», puso de manifiesto.

«Muchos pensaban que Francisco era una ruptura con Benedicto XVI, y no fue así. Francisco tradujo al castellano la profunda teología de Benedicto XVI y la ha llevado a cabo de forma sencilla», señaló el obispo de Canarias sobre las semejanzas entre Bergoglio y su antecesor.

Mazuelos aseguró que la noticia del fallecimiento de Bergoglio, obispo de Roma durante 12 años, fue un «shock» y más tras su reaparición pública. «Cuando lo vi el domingo de Resurrección sin oxígeno, pensé: 'Casi seguro termina en Canarias'».

Mazuelos, en nombre de la Diócesis canaria, aclaró que «a los sentimientos humanos de dolor y tristeza, se suma un sentimiento de alegría y esperanza», la «alegría de saber» que el Papa Francisco «ya ha sido llamado a la casa de Padre, donde se ha encontrado con Jesucristo Resucitado».

Por último, invitó al conjunto de la ciudadanía a unirse a la comunidad religiosa en sus oraciones por el pontífice, para «rezar por el eterno descanso de su alma».

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