Olfato para combatir delitos
Amor, comida, juguetes y mucha paciencia son los ingredientes principales para formar a perros para que ayuden a detectar sustancias olorosas. Son el apoyo indispensable de los cuerpos de seguridad y emergencias para descubrir droga, explosivos, dinero oculto, pero también para actuar con especies en vías de extinción.
Cristina González Oliva
Lunes, 4 de diciembre 2017, 12:00
La sede la Policía Local de Telde, en La Garita, acogió la pasada semana dos días de jornadas formativas sobre perros detectores de sustancias olorosas, organizadas por el sindicato CSIF. Una quincena de miembros de policías locales de Las Palmas de Gran Canaria, Santa Brígida, Agüimes y Telde, además de agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Canaria, de Domican y de funcionarios de prisiones, formaron parte de esta iniciativa. Estuvo impartida por Marcos Fernández, director de Etocan Pro-DetectionK9, junto a la instructora Beatriz Pineda. El evento, que incluyó teoría y práctica, contó con la colaboración del club Les Chiens d’Acier.
Junto a los participantes estuvieron casi una decena de perros, algunos de ellos de los propios agentes, que fueron los protagonistas de la formación junto a sus dueños.
La mayor parte de los adiestramientos están destinados a explosivos, dinero y cinco tipos de droga, como la heroína, cocaína, marihuana, éxtasis o hachís, explican los instructores. Lo más fácil suele ser el cannabis porque no se adultera. Pero hay muchas otras sustancias que pueden detectarse, desde meteoritos, pasando por plagas para su control, especies invasoras o enfermedades en las personas. Los perros son ideales ya que tienen entre 150 y 400 millones de células olfativas frente a los 7 del ser humano.
Fernández explica que un can podría tardar alrededor de un mes en adiestrarse. Hay varios pasos pero el refuerzo positivo de afecto, comida y juguetes es primordial. «Es totalmente falso que se les drogue», dice y explica que la formación se hace a través del juego y la alimentación.