Adargoma Hernández: «'La Reina del Flow' dejó ºhuella en Fuerteventura»

Pocos eventos han generado tanto entusiasmo, proyección internacional y sentimiento de orgullo insular en Fuerteventura como el rodaje del último episodio de la tercera temporada de 'La Reina del Flow', una de las series de habla hispana más vistas en plataformas como Netflix. El capítulo se grabó en abril en la playa del Matorral, en Morro Jable, ante más de 12.000 personas que, además de ser testigos de un fenómeno global, participaron de una vivencia colectiva sin precedentes. La magnitud del acontecimiento, que fue también un concierto en directo protagonizado por el elenco de la serie, forma parte ya de la memoria cultural de la isla.

Adargoma Hernández, consejero de Aguas, Educación y Juventud del Cabildo de Fuerteventura, ha hecho un balance de la experiencia, que califica como «más positivo de lo que se esperaba». En su análisis, el evento no puede entenderse como una acción aislada, sino como parte de una estrategia integral que tiene como objetivo ampliar las oportunidades culturales, formativas y participativas para la juventud de la isla. «Desde el inicio de esta legislatura, la presidenta nos marcó un objetivo muy claro: que los jóvenes de Fuerteventura no tengan que desplazarse fuera para acceder a este tipo de experiencias. Que puedan vivirlas aquí», afirma.

El consejero relata que todo comenzó con una llamada del productor David Navarro, de DN7 Music, que planteó la posibilidad de llevar a Fuerteventura el rodaje del episodio final de la serie. «Era una oportunidad que no podíamos dejar pasar. Se la trasladamos a la presidenta del Cabildo y su respuesta fue clara: había que hacerlo posible», recuerda. A partir de ese momento, se activó una maquinaria institucional que, en tiempo récord, coordinó el rodaje con el concierto multitudinario, en un entorno natural protegido y bajo condiciones técnicas complejas.

Lo que ocurrió en Jandía, según Hernández, superó todas las previsiones. «No solo tuvimos un lleno total de la playa. También vivimos un fenómeno fan que hacía mucho no se veía en la isla. En el aeropuerto, en los hoteles, en los accesos al recinto, miles de personas esperaban para ver a sus ídolos. Y el elenco se comportó con una profesionalidad y una cercanía ejemplares, a pesar del cansancio y las horas de vuelo».

Pero el consejero insiste en que lo más importante fue el valor simbólico y práctico para los jóvenes majoreros. «La serie es un fenómeno global, y que sus protagonistas actuaran y grabaran aquí, en su isla, sin que tuvieran que viajar a Gran Canaria o Tenerife, es algo que va más allá del entretenimiento. Es una inyección de autoestima para nuestra juventud, que también tiene derecho a vivir experiencias culturales de primer nivel sin salir de casa».

En ese sentido, Hernández destaca que el rodaje se enmarcó dentro del programa Fuerteventura Joven, que ya el año pasado organizó conciertos como el de Cruz Cafuné en Puerto del Rosario, y que este año ha dado un salto cualitativo con 'La Reina del Flow'. Pero además, el Cabildo no solo apuesta por eventos lúdicos: también impulsa formación, cultura y nuevas tecnologías. «En junio tendremos la tercera edición de la Universidad de Verano, centrada este año en inteligencia artificial, y seguimos potenciando espacios como el Centro Insular de Juventud, donde jóvenes de la isla graban sus discos, preparan maquetas o desarrollan proyectos creativos», detalla.

Respecto al potencial cinematográfico de Fuerteventura, el consejero recuerda que la isla cumple ya una década como plató natural gracias a la labor de la Film Commission. «Fuerteventura es un escenario real, y nuestra política es clara: queremos que nos sigan eligiendo por eso, no por convertirnos en un plató artificial lleno de estructuras o construcciones. Defendemos el equilibrio entre promoción, sostenibilidad y protección del territorio».

Preguntado por la posibilidad de futuras grabaciones, Hernández no duda: «Si hubiera una cuarta temporada de 'La Reina del Flow', o un proyecto similar, Fuerteventura estará preparada para acogerlo, dentro de nuestras capacidades. A veces se da por hecho que los grandes eventos deben ir a las islas capitalinas, pero desde las administraciones tenemos el deber de equilibrar ese acceso. Nuestra juventud también merece ver a sus ídolos sin necesidad de desplazarse».

Para el consejero, este evento no solo ha servido para posicionar la isla en el mapa internacional de producciones audiovisuales, sino para demostrar que Fuerteventura puede liderar iniciativas con impacto global desde una lógica local, con talento, responsabilidad institucional y compromiso comunitario. «Esto ha sido más que un rodaje. Ha sido una experiencia colectiva que ha dejado huella. Y esa huella se va a seguir sintiendo mucho tiempo».

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