Madurez llena de confianza

Su ajetreo es constante, algo con lo que soñaba cuando inició su aventura en el mundo de la interpretación. Poder cuadrar unos minutos con Mariam Hernández en Madrid fue complicado ya que llegaba de grabar en Cofete para la Fuerteventura Film Comission y está en pleno proceso de preparación de sus dos nuevos trabajos en el cine.

La actriz majorera está feliz y reconoce que atraviesa un buen momento. «Me encuentro en uno de mis mejores momentos, con una mayor madurez personal y profesional, lo cual me permite elegir proyectos, no tener miedo y confiar más en mí». Salió de su Fuerteventura natal en 1999 y, echando la vista atrás, reconoce que «cuando terminé COU y me fui de la isla no tenía ni idea de lo que que me depararía el futuro. Cuando hago balance de todo este tiempo me da mucha satisfacción todo lo que he ido consiguiendo, poco a poco y trabajando mucho. Ha sido mucho esfuerzo y ha habido etapas de todo tipo pero, sin duda alguna, ha valido la pena. Sigo echando de menos mi isla, a mi familia y a mis amigos de toda la vida, pero mi profesión me llena muchísimo y por ahora mi base sigue estando en Madrid. Eso sí, ¡me escapo a Fuerteventura siempre que puedo!», recalca.

Ahora mismo prepara su interpretación en dos nuevas películas, Sol a Cántaros, del director Dani de la Orden, y Ajedrez para tres, dirigida por Inés de León, tras su paso por la serie televisiva Amar es para siempre, que le dejó huella. «Es una serie que lleva doce años en antena precisamente por su formato, y cada año renuevan a casi todo el elenco; los protagonistas y las tramas cambian. Terminé mi contrato y mi temporada, fue una etapa preciosa en la que aprendí muchísimo», subraya.

Su curriculum ya es muy amplio, tanto en cine como en teatro y televisión. «Los tres medios me fascinan», apostilla. La cultura ha quedado también muy tocada con la crisis y Mariam Hernández lo ha podido vivir en sus propias carnes, pero su carácter alegre y optimista le da una visión de las cosas en la que no le gusta mirar hacia atrás. «Creo que estamos viviendo un momento de auge. Se están produciendo series y películas españolas de muchísima calidad, hay muchas más productoras, canales, plataformas, coproducciones, etc. Es un buen momento para la profesión y espero que siga así».

Antes comentaba que está en su buen momento, aunque también añade que lo mejor «está por llegar. (risas)». Sobre el futuro y sus sueños, siempre lo ha tenido muy claro: «Mi única meta es ser feliz».

Este verano ha sido algo distinto para ella. «Después de 3 años haciendo series diarias -2 años en Gym Tony y uno en Amar es para siempre), necesitaba un descanso. A veces, es necesario desconectar de la profesión para renovar energías y cargar las pilas. Así que me he tomado unos meses para mí, para viajar, hacer kitesurf y estar muy cerquita del mar que, como buena isleña, me apasiona».

Y llegamos a su otra gran pasión. El deporte. Mariam Hernández se cuida mucho y le encanta la práctica deportiva. Windsurf, kitesurf, wakeboard y running son sus preferidos. Está claro que el contacto con el mar es fundamental para esta actriz, ya que lo lleva enlos genes. Dentro de sus últimas novedades la grata sorpresa es que Mariam Hernández acaba de fichar por el equipo de kitesurf de la campeona del mundo Gisela Pulido. «Así es. Acabo de fichar por el equipo de Gisela Pulido en kitesurf y soy embajadora de su marca, Liquid Force, y tenemos varios retos y viajes juntas», añade.

Su pasión por el deporte también la traslada a su alimentación ya que Mariam Hernández se cuida muchísimo. «Apenas tengo tiempo para cocinar pero siempre que puedo me encanta probar platos nuevos. Cocino muy sano, mucha verdura, cereales integrales, legumbres, pescado... Pero mis platos preferidos siguen siendo el sancocho y las croquetas de mi madre. Jajaja», apostilla de forma jocosa, y es que las raíces son las raíces.

De aquí a final de año tiene la intención de correr un medio maratón -21 kilómetros-, aunque su gran objetivo diario es «seguir disfrutando del deporte como parte de mi vida». Su día a día suele ser muy animado ya que Mariam no para. Reconoce que «no hay días normales ya que depende de la agenda. Hay días de madrugones y rodaje, otros de muchas horas de estudio, otros de viajes y deportes; días de castings, o de entrevistas, eventos, etc. Eso sí, intento que cada día haya ratitos de deporte y otros de calma, porque mi profesión es caótica y hace falta liberar estrés y equilibrar la balanza», recalca.

Se considera una mujer coqueta, aunque «no voy mucho de compras», y en relación al mundo de la moda reconoce que «me atrae, pero no me obsesiona. Me gusta la moda, me fijo en las tendencias para vestirme en los eventos y estrenos, pero en mi día a día prefiero ir cómoda. Soy muy de vaqueros y camiseta».

Majorera por los cuatro costados, allá donde vaya realza sus orígenes y las bellezas de su isla de Fuerteventura. «Después de tantos años fuera y de viajar mucho, me sigue pareciendo uno de los lugares más especiales y bonitos del mundo. Fuerteventura es una isla mágica y siempre necesito volver», destaca.

Mariam Hernández, a sus 34 años, está feliz. Siente pasión por su profesión y por sus aficiones y vive el día a día con intensidad y optimismo. De espíritu viajero, soñadora y luchadora, la actriz majorera sigue subiendo peldaños en el mundo de la interpretación y, como ella dice, «lo mejor siempre está por llegar».

Windsurf, kitesurf, wakeboard o running. Mariam Hernández manifiesta su pasión por el deporte. Los deportes acuáticos son su modus vivendi, ya que «necesito agüita salada», recalca. Este pasado verano viajó hasta Madagascar y disfrutó del kitesurf. En esta entrevista para C7 desveló el acuerdo alcanzado con la campeonísima de kitesurf Gisela Pulido para ser embajadora de su marca, Liquid Force. Correr y estar en el mar son sus grandes aficiones. Mariam Hernández ha participado en varias carreras populares y de aquí a final de año tiene intención de poder correr algún medio maratón. La tensión diaria de la profesión la suelta con deportes con una enorme carga de adrenalina. La actriz majorera, en casi todas las entrevistas en las que toca su aspecto más personal, saca a relucir su lado aventurero y deportivo.

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