Román Rodríguez y Carmelo Ramírez pasan el testigo y dejan la dirección de NC tras 20 años
El presidente del partido hizo el anuncio al término de su informe de gestión, aprobado por unanimidad | Los dos políticos llevaban al frente de los canaristas desde su fundación, en 2005
Román Rodríguez y Carmelo Ramírez dejan la dirección de Nueva Canarias. «Nos toca pasar el testigo». Así lo anunció el presidente de los canaristas al término del informe de gestión con el que se abrió esta tarde el VI Congreso Nacional de esta formación, que nació en 2005, y que se aprobó por unanimidad. Los dos veteranos políticos nacionalistas llevaban 20 años al frente de NC, Rodríguez en funciones de presidente nacional, y Ramírez, como secretario de Organización.
«No es porque no tengamos fuerzas, no es porque nos sintamos desmoralizados, sino porque creemos que es muy útil para este proyecto pasar el testigo a gente comprometida, a gente capaz, a gente competente», anunció Rodríguez en mitad de los aplausos de los 300 delegados y delegadas que abarrotaron el Cicca, en la capital grancanaria, donde el partido celebra este sábado y mañana domingo el sexto congreso de su historia con el lema 'Raíces. Valores. Futuro'.
Hizo el anuncio no sin cierta ceremoniosidad, la que se reserva para las grandes ocasiones. Y preparó el terreno dejando claro que era la primera vez que iba a hablar en nombre de Ramírez, su mano derecha en el partido todos estos años. No en vano, recordó que han compartido militancia política durante los últimos 40 años. «Como le decía a Carmelo, el único problema que tengo es un callo de tanto caminar, pero estoy fuerte, tengo ganas, tiempo, esfuerzo y energía». Sin embargo, acto seguido reconoció. «Nos toca pasar el testigo a la siguiente generación».
Se van, pero seguirán para lo que haga falta, vino a decir, porque, aunque con dificultad, en mitad del estruendo de los aplausos, a Román Rodríguez se le escuchó dejar claro que los que a partir de este domingo asuman la dirección del partido los podrán seguir teniendo a su lado. «No para tutelarlos, no para controlarlos, sino para apoyarles». El plazo para presentar candidaturas se cierra a las 09.00 horas de la mañana de este domingo, al inicio de la segunda y última jornada del congreso. La organización saldrá de esta cita con un renovado equipo directivo.
El expresidente de Canarias cerró así una intervención centrada en sacar pecho por el trabajo desarrollado en estos 20 años de trayectoria y en la que explicó los esfuerzos que se hicieron en estos últimos meses para dialogar con el sector que estaba descontento y que finalmente se salió del partido, liderado por el alcalde de Gáldar y líder del Bloque Nacionalista Rural, Teodoro Sosa, y por el de Agüimes, Óscar Hernández, cabeza visible de Roque Aguayro.
«Dijimos que estábamos dispuestos a hablar, a escuchar, a encauzar. Creamos mesas de diálogo. Pusimos al frente de ellas a gente de la siguiente generación para facilitar el entendimiento», se explicó Román Rodríguez. Prueba de ello, dijo, es que adelantaron este congreso, que, según los estatutos, tocaba para 2026. «Pero no hubo manera porque el plan estaba diseñado y el final estaba escrito. No querían acuerdos, no querían debates, no querían democracia. Querían imponer una posición inaceptable, un golpe de mano diseñado en cenáculos, diseñado por una minoría, por gente extraña a este proyecto».
El presidente saliente de NC abundó en que les dijeron que sí a su propuesta de cambiar las políticas, a buscar otro modelo de organización y a hacer cambios en la dirección, pero que solo le pusieron una condición: «Los cauces, el partido, la democracia, el congreso, la participación, no la imposición, ni los golpes de mano. Y el tiempo coloca a cada cual en su lugar», subrayó entre los aplausos de los militantes.
«Hemos visto que la renovación era el pretexto; el objetivo era la liquidación de Nueva Canarias; el objetivo era la subordinación de Nueva Canarias al insularismo conservador; y tenemos que decir claro y fuerte que somos distintos al insularismo conservador», enfatizó respecto a los partidos y militantes que en los últimos meses dejaron la formación canarista y han fundado Municipalistas Primero Canarias.
En su balance de gestión, Román Rodríguez reivindicó el papel que ha jugado NC en estos 20 años, en la calle y en las instituciones, y desgranó algunos de sus logros, como la moratoria, la bonificación del 75 % en los billetes de avión y barco entre islas y con la península, la reforma del Estatuto y el nuevo Régimen Económico y Fiscal (REF), la aprobación de la Ley Canaria de Educación o la prohibición de que se construyera el barranco de Veneguera.
Frente a los que dicen que no son de izquierdas ni de derechas, Rodríguez definió a NC como de izquierdas, nacionalista, feminista y ecologista, comprometida con la paz, los derechos humanos, la legalidad internacional, solidaria con los pueblos saharauis y palestino, y en contra de la invasión de Ucrania.
Tras su intervención se debatieron y aprobaron varias propuestas de resolución, pero el presidente saliente dejó antes una receta para seguir vivos frente al auge de la extrema derecha: trabajar en las confluencias progresistas.
Ramírez: «Defendemos la democracia, no la plutocracia ni la teocracia»
Visiblemente emocionado, Carmelo Ramírez tuvo que pararse varias veces en su discurso de bienvenida al congreso. Se le fue la voz cuando quiso enfatizar que para llegar hasta esta cita habían dedicado seis meses de esfuerzo y también cuando dejó claro que las ponencias y las resoluciones llegan todas consensuadas. Pero enseguida cogió fuerzas, recurrió al chascarrillo de que estos parones emocionales eran fruto de las exigencias de Pedro Justo, consejero de Economía y compañero suyo en el gobierno del Cabildo, y no tardó en pasar al ataque con el sarcasmo del que suele hacer gala. «Nosotros defendemos la democracia, el gobierno de los pueblos; no defendemos la plutocracia, el gobierno de los ricos, ni la teocracia, el gobierno de los que han sido ungidos», y miró al cielo entre las risas cómplices del público, que sabían que Ramírez aludía a Teodoro Sosa, también consejero y compañero suyo en el Cabildo y líder de los que decidieron poner tierra de por medio frente a NC y abandonaron el partido. Tras sus palabras se dio paso a la votación de la mesa del congreso, formada, como presidenta, por Leticia López, como vicepresidentes, primero y segunda, Gustavo Rodríguez y Belén Machín, como secretario, Víctor Rodríguez, y como vocal, Lucía González.