El Parlamento aprueba la modificación de la ley del transporte de Canarias
La oposición de izquierdas dice es un «parche» y Vox lamenta que se entrega a la «religión climática» y no resuelve el conflicto de las VTC
El Pleno del Parlamento de Canarias ha aprobado este miércoles, con los votos a favor de los grupos que sustentan al Gobierno -a excepción de AHI que estaba ausente-, la abstención de PSOE y NC-bc y el voto en contra de Vox, la modificación de la ley del transporte de Canarias.
La diputada de Vox, Paula Jover, espera que se termine la «telenovela» sobre la entrada de Uber y Cabify en Canarias y ha valorado que la tramitación del proyecto de ley haya sido «sosegada», pero cree que se ha «desaprovechado una oportunidad» porque la Cámara «se ha rendido» a la «religión climática».
Ha apuntado que la ley «va en contra» del desarrollo económico y la calidad de vida de los canarios, ha cargado contra la «moratoria» de los 9.500 solicitantes de licencia VTC y lamentado que no se haya tenido en cuenta su enmienda para que las empresas de turismo activo puedan operar en puertos y aeropuertos.
Esther González (NC-bc) ha afirmado que en su grupo están «casi pletóricos» con la aprobación de la modificación de una ley «vieja y maltrecha» que tampoco cuenta ahora con el apoyo unánime del subsector de los transportes ya que la modificación «es un parche».
Ha comentado que el texto «ignora» a los usuarios para que puedan «elegir el medio de transporte que más les satisfaga» y culpabiliza a los 27.000 vehículos ligeros del «caos ecológico» del archipiélago, si bien ha valorado que las enmiendas del cuatripartito coinciden en gran parte con la enmienda a la totalidad de su formación.
Marcos Bergaz (Lanzarote) ha lamentado la falta de «mano izquierda» del cuatripartito para admitir más enmiendas de su grupo al tiempo que ha dejado claro que esta modificación «no es la nueva ley» que necesitan las islas.
Ha comentado que los socialistas «dejaron en el despacho» de la Consejería de Obras Públicas un anteproyecto de ley y ha advertido del «tsunami» que viene con las licencias de VTC pendientes y que sería «un torpedo en la línea de flotación» del subsector del taxi.
Por ello, ha hecho un «llamamiento» al consejero, Pablo Rodríguez, para que «auxilie a todos y cada uno de los cabildos para que fijen criterios adicionales objetivos» y se acabe con el «comodín» de las moratorias.