Partidos y ONG celebran que el Estado acelere el traslado de inmigrantes
Valoran positivamente el cambio de política pero insisten en que no es la solución definitiva y deben seguir trabajando en la gestión de la crisis
Canarias ha visto cumplida una de sus mayores demandas para aliviar la presión migratoria en las islas después de que el Ministerio de Migraciones haya apurado el ritmo de los traslados hasta la península en las últimas semanas. De forma generalizada, todos los partidos políticos aplauden la medida, aunque aseguran que llega tarde y se mantienen críticos sobre el futuro.
La falta de transparencia, uno de los principales reproches hacia el Estado, continúa preocupando a Podemos y Nueva Canacias, que exigen una mayor coodinación con las partes involucradas y la definición de protocolos que permitan conocer cuántas personas se derivan, con qué frecuencia y quiénes son. «Estamos en una situación mucho mejor que antes, pero creemos que se puede aumentar el ritmo», indica Luis Campos, portavoz parlamentario de NC. «Hay que seguir trabajando en la búsqueda de mecanismos necesarios, porque Canarias solo puede hacerse cargo de un volumen determinado de manera digna».
Este requerimiento, sin embargo, va más allá del control de la oposición, afirma la diputada de CC Jana González, apuntando a las leyes de transparencia. «No se puede esperar a cuentagotas por la información, también hay que dar explicaciones a las personas que viven aquí», afirmó.
Respecto a las últimas cifras de la Delegación del Gobierno, que estiman que en el archipiélago aún permanecen 4.000 migrantes de los más de 27.500 que llegaron desde el año pasado, la secretaria de Políticas Públicas de Podemos, Gemma Martínez, asegura que «no le cuadran». El paradero de alrededor de 8.000 personas le resulta desconocido y llama la atención sobre el creciente número que se encuentra en situación de calle. «No puede ser que el Estado utilice Canarias como territorio para instalar campamentos pero no informe a autoridades locales de la situación», añade. «Si se está trasladando solo a los perfiles vulnerables, ¿qué sucede con el resto al que no se ha deportado?».
Por otro lado, desde el PSOE señalan como freno a la gestión migratoria el virus, las dificultades en los diálogos con Senegal, Mauritania y Marruecos para las devoluciones y la falta de espacios de acogida pública en las comunidades autónomas para hacerse cargo de los migrantes. «Ahora que las ONG han ofrecido estos recursos se ha abierto más la puerta», apunta Luc André Diouf. «Los traslados no son la solución definitiva, pero hay que poner en valor los esfuerzos que se están haciendo». Unas declaraciones a las que se suma Jesús Ramos, desde ASG: «Me gustaría pensar que finalmente están escuchando las reivindicaciones que llevamos meses haciendo desde Canarias, pero también hay que recordar que todo pasa por una solución y tiene que trabajarse en origen».
Precisamente, la cooperación internacional es una exigencia compartida por todos los partidos, que no solo implica el desarrollo de África y el combate contra las mafias sino, también, la corresponsabilidad por parte de Europa, a la que se critica «mirar para otro lado».