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Las cuentas siguen pese al amago de desmarque del PNV

Las cuentas siguen pese al amago de desmarque del PNV

Los Presupuestos Generales del Estado de 2018 superaron sin dificultad la primera votación en el pleno del Congreso y se enfrentan este miércoles a la jornada decisiva, con los cincos diputados vascos dispuestos a mantener la incertidumbre sobre el sentido de su voto hasta el último minuto

Jueves, 1 de enero 1970

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El proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018 superó ayer en el Congreso la primera de las tres votaciones decisivas en pleno, pese a la incertidumbre creada por el PNV con su amago de desmarque por el retraso del Gobierno en levantar la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña.

Aunque los cinco diputados del grupo parlamentario vasco respaldaron ayer las cuentas públicas, su intención es alargar el suspense hasta el último momento y solo en la última votación -que tendrá lugar esta tarde- decidirán si le dan el sí definitivo a los Presupuestos o los dejan caer, rompiendo así el acuerdo que habían cerrado con el PP.

Mientras, el Gobierno trata de convencer al PNV de que si mantiene el 155 es porque el nuevo presidente de la Generalitat, Quim Torra, pretende formar su Ejecutivo con consejeros encarcelados, procesados o huidos, y apela a la responsabilidad de la formación nacionalista vasca para sacar adelante los PGE y dar estabilidad a la legislatura.

En todo caso, en el ámbito parlamentario se interpreta la estrategia del PNV de no garantizar su apoyo a Rajoy como una mera escenificación para «mantener la atención», más que una amenaza real de tumbar las cuentas estatales. Entre otras razones porque de hacerlo frustrarían la subida generalizada de las pensiones que ellos mismos lograron que Rajoy aceptara, y dejarían al País Vasco sin una inversión prevista de 500 millones de euros, destinada esencialmente a infraestructuras. De hecho, el Partido Popular no contempla otro escenario diferente a que el PNV sea «coherente» con la negociación y los acuerdos alcanzados.

Otro bache menor en el camino de los Presupuestos lo protagoniza el partido Unión del Pueblo Navarro (UPN), aliado electoral del PP, que pese a apoyar al Gobierno y estar a favor de que se aprueben las cuentas estatales, ha condicionado el voto de sus dos diputados en el grupo parlamentario mixto a que Rajoy se comprometa a no negociar en ningún caso el acercamiento de los presos de ETA a las cárceles del País Vasco y Navarra.

El resultado de las dos votaciones previstas para hoy en el Congreso, en las que no caben ausencias ni errores, son asimismo cruciales para la agenda canaria y las partidas que ya están recogidas en las cuentas de 2018. Uno de los principales acuerdos del pacto suscrito por NC con el Gobierno de Rajoy, el aumento de la bonificación a residentes para viajar a la Península del 50% al 75%, quedó ratificado ayer con la aprobación de la sección correspondiente al Ministerio de Fomento.

También pasó ayer el filtro de las votaciones la dotación de 200 millones para dotar el Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Inicialmente el proyecto de ley recogía solo 80 millones, a los que se iban a sumar otros 50 millones pactados por NC y PP, pero la decisión de CC de apoyar la enmienda de 120 millones promovida por el PSOE forzó al Gobierno a aceptar la propuesta mayoritaria, que finalmente contó con la unanimidad de todos los grupos parlamentarios.

De superar el trámite de hoy sin sobresaltos, los Presupuestos de 2018 pasarán al Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta, con la previsión de que si no hay nuevos cambios salgan definitivamente aprobados dentro de un mes, el próximo 19 de junio.

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