Espino (Cs) se suma a Pérez (PP) y pide respecto en el Parlamento

La parlamentaria de Ciudadanos (Cs), Vidina Espino, tal como ha hecho la popular Astrid Pérez, reclama «respeto» y «trato igualitario» en la Cámara regional ante actitudes machistas que, según señalan ambas, son reiteradas. La diputada del PP presentó la semana pasada una queja ante la Presidencia del Parlamento por la actitud «misógina» y el «trato vejatorio» por parte del consejero de Administraciones Públicas, Julio Pérez, en una comisión de Gobernación, Justicia y Seguridad celebrada el 6 de abril. En un escrito a la Mesa de la Cámara sellado al día siguiente de esta fecha, Espino reclamó igualmente que la modificación prevista del Reglamento del Parlamento incluya, con carácter expreso, un precepto en el que se regule la «exigencia de respecto efectivo» y «trato igualitario» a la mujeres diputadas. Asimismo, demanda que se traslade al Gobierno de Canarias el «malestar» de las parlamentarias de la oposición por estos hechos.

Además de esta queja formal, en un «chat» en el que participan los miembros de la Junta de portavoces, la diputada de Cs escribió el mismo día de la Comisión una nota en la que denunció que llevan toda la legislatura sufriendo «un machismo soterrado que hoy alcanza su máxima expresión», argumentando además que «esto no va de partidos, va de igualdad y respeto» y por eso, pide que «de una vez por todas» se actúe de manera «contundente con este asunto».

Al respecto, el presidente del Parlamento, Gustavo Matos, se ha mostrado tajante al señalar que en esta institución «no cabe el machismo ni el tratamiento inadecuado» a ningún miembro de la Cámara. Por eso, la Mesa ha actuado de oficio y desde el primer momento solicitó a la presidenta de la Comisión de Gobernación, la socialista Rosa Bella Cabrera, un informe sobre la «incidencia» producida entre Astrid Pérez y Julio Pérez y la emplaza a que en cinco días, señale también si adoptó alguna de las medidas previstas en el reglamento. La previsión es que este asunto se vuelva a abordar por el órgano de dirección de la Cámara el próximo jueves.

Matos hizo hincapié en que, si la Mesa así lo considera, se dirigirá al Gobierno de Canarias exigiendo «el decoro y el tratamiento adecuado». Reitera que «no existe ningún inconveniente para ello, ya se ha hecho y el Reglamento lo respalda». En cualquier caso, apunta que en este tipo de incidencias se debe actuar «en el momento en que se produce por parte de la Presidencia de la Comisión».

En este mismo sentido se manifestó la diputada de Nueva Canarias (NC) y miembro de la Mesa del Parlamento, Esther González, para indicar que la Presidencia y el conjunto de las mesas que dirigen las comisiones «además de dar la palabra y dirigir el debate, son autoridad en ese momento y, por tanto, deben dar amparo a las diputadas y los diputados y hacer cumplir el Reglamento».

Es contundente para señalar que este tipo de actitudes «no deben ampararse» por el Parlamento de Canarias ni por los diferentes partidos aunque sean sus miembros quienes las expresen. Entiende que es «complicado» dirigirse al Gobierno o a un determinado parlamentario o formación política apercibiéndolos por sus actitudes machistas pero «ni es la primera vez que se hace» ni cree que se deba dejar pasar la oportunidad de llamar la atención por posturas machistas.

Por otro lado, y a nivel general, la diputada de NC considera que «no es aceptable» que un miembro del Gobierno, en una sesión de control, «se defienda atacando a los diputados». A su juicio, deben rebatir las críticas del Parlamento «con argumentos». «El Parlamento, como reflejo de la sociedad, tiene actitudes machistas». Por eso, dice, «es conveniente que se vayan acostumbrando a evitarlas».