Secciones
Servicios
Destacamos
Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.
Opciones para compartir
Pilar Palomero (Zaragoza, 1980) extrajo de las vivencias reales de las chicas de un centro de acogida de Barcelona la materia dramática que necesitaba para su segundo largometraje. Su protagonista, encarnada por Carla Quílez, a la que la directora encontró en Instagram, es una chica llena de rabia que vive en un pueblo de Los Monegros. Hija de una madre joven que no la hace mucho caso, se queda embarazada con 14 años y acaba en un centro de Barcelona junto a otras adolescentes en su situación. Algunas de ellas aparecen en la segunda película de la autora de 'Las niñas', ganadora de cuatro Goyas el año pasado, aunque Palomero deja claro que 'La Maternal', que se estrena en cines el 18 de noviembre, es pura ficción.
-¿La Maternal existe?
-Sí y no. Se basa en un centro residencial para madres adolescentes de Barcelona, donde yo vivo. Se llama Residencia Maternal Antaviana y Karol, la educadora de la película, trabaja en el centro. Nos ayudaron un montón.
-¿Qué le llamó la atención de las chicas cuando las trató?
-Ellas fueron el motivo por el que quise hacer la película. Yo ya me había documentado para ver si se me sentía capaz de escribir el guion, pero la motivación principal vino cuando descubrí su entusiasmo. Las llamaba y todas querían contar su historia, deseaban que se hiciese esta película. Me enamoré de su forma de ser y de enfrentarse a los problemas después de las experiencias tan extremas que han tenido que vivir. Me transmitieron las ganas de explicar cómo habían vivido su maternidad tan precoz, con 16, 14 años. Todas tenían muy presente la herida del juicio social, del pueblo, la familia, los amigos. Querían que se supiera esta realidad.
-Estas chicas no solo llegaban embarazadas, sino que arrastraban diferentes problemáticas: maltratos, abusos sexuales, trastornos de la alimentación, intentos de suicidio, drogas…
-Cada vivencia es única, cada chica tiene historias muy duras. Es un centro residencial para personas en situación de vulnerabilidad, de exclusión social. Tienen problemas importantes con sus familias, sus parejas… He escuchado historias muy duras de todo tipo. Pero me han transmitido la fuerza que ellas tienen, la resiliencia, la capacidad de sobreponerse y continuar hacia adelante con lo que les ha tocado. Lamentablemente, nos condicionan las desigualdades sociales.
Noticia Relacionada
-Una de las protagonistas afirma que quiere tener el niño para no estar sola.
-Lo he escuchado más de una vez. Sucede muy a menudo, menores que necesitan ese amor y que lo encuentran en el hijo que van a tener. Es precioso y muy doloroso a la vez.
-Podríamos pensar que ninguna de esas menores ansía ser madre, ninguna quiere tener un niño.
-Cada caso es único, pero ninguna quiere ser madre en la adolescencia. El problema, como le sucede a la protagonista, es que cuando se enteran de que están embarazadas ya no pueden abortar porque han transcurrido más de tres meses. Creo que tiene mucho que ver con la falta de educación sexual, con el conocimiento de tu propio cuerpo. Son temas muy importantes y nos toca reflexionar sobre ellos como sociedad. Esta película no va sobre la maternidad, sobre una chica que tiene un hijo y cómo lo cuida, sino que trata de una adolescente que a la vez le toca ser madre. Son dos momentos vitales antagónicos.
-¿Cree que no es compatible ser madre y adolescente?
-Lo hablaba con la educadora del centro. Ves a una adolescente chillando a su bebé y piensas que es una mala madre. No, es una adolescente, que también grita a su madre. Vive un momento en el que su personalidad se está formando y en el que estás muy ensimismado. La maternidad es todo lo contrario: dar, dar y dar. Es lógico que una adolescente no esté preparada para ser madre, si no lo está una mujer de treinta… Eso no quiere decir que no lo puedan ser. Las cinco chicas protagonista son cinco madrazas, pero son conscientes de que les ha tocado ser madres en un momento en que no querían serlo.
-¿Entonces se interpretan a sí mismas?
-No del todo. Sus vivencias están ahí, pero en la película han sido actrices. Han hecho un trabajo actoral impresionante.
-'La Maternal' no es un documental.
-No. Hemos repetido las tomas una y otra vez. Y estas chicas me han dejado asombrada con su naturalidad.
-Refleja la cultura urbana de un adolescente actual, en la que el móvil está omnipresente.
-Sí. Lo vi en el casting y los ensayos. Tenemos que asumir que el móvil forma parte ya de todo. No es tanto una crítica, sino una propuesta de reflexión. La película empieza viendo una película porno en el móvil. No es una cuestión de censurarlo, sino de educarles. En mi época, como mucho veíamos el porno codificado de Canal Plus, como aparece en 'Las niñas', o la portada de una revista en el kiosco. Ahora hay un contenido muy bestia para el que hace falta una educación emocional para entender lo que estás viendo.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.