Una Cruella punk para todos los públicos

Craig Gillespie, director de la salvaje e irónica 'Yo, Tonya', biopic de la patinadora Tonya Harding, parece el realizador idóneo para transmitir dosis de marrullería y amoralidad al personaje de Cruella, trasladado al Londres de los años 70. En pleno movimiento punk, la joven Stella intenta labrarse un nombre en el mundo de la moda, donde reina la baronesa Von Hellman (Emma Thompson). No hay que preocuparse porque Stella/Cruella resulte demasiado salvaje en su transformación a lo Joker. Estamos en una película Disney y el humor y el ritmo frenético es apto para todos los públicos. La diseñadora de vestuario Jenny Beavan, ganadora de dos Oscar por 'Una habitación con vistas' y 'Mad Max: Fury Road', se luce tanto como Emma Stone, que viste 47 trajes a lo largo del metraje. Como ocurre con los últimos bombazos Disney, la cinta llega al mismo tiempo a los cines y a su plataforma para suscriptores a un precio de 21,99 euros.