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La votación presupuestaria

La votación presupuestaria

Del director ·

CC ya tiene un cuartel de invierno y otro se lo presta el PP

Viernes, 18 de diciembre 2020, 06:40

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Si la fortaleza de un Gobierno de coalición se mide por la capacidad de sacar adelante en el Parlamento sus leyes, habrá que concluir que el de Ángel Víctor Torres no presenta patología alguna. Ysi esa salud se mide también por la capacidad para que la ley más importante de cada año, esto es, la de presupuestos, sea aprobada sin problemas, puesto que entonces no queda otra que admitir que la maquinaria del pacto sigue engrasada. Después, como en todo, están los matices.

Ayer el Parlamento aprobó las cuentas autonómicas para el próximo año. Lo hizo sin grandes sorpresas en el lado contratante del cuatripartito, mientras que en el de la oposición pasamos de una Coalición Canaria menos beligerante en el inicio del proceso y más crítica en el tramo final. Es como si el ardor guerrero les hubiese sobrevenido desde que Fernando Clavijo es jefe de filas y, sobre todo, desde que Ana Oramas ha vuelto a donde estuvo en el inicio de la legislatura estatal:en el bloque de la oposición frontal al PSOE y Podemos, donde conviven lo mismo el PP que Vox y un sector de los herederos de CiU.

En el caso de Canarias, estamos hablando de un cuatripartito al que entre el PP de Australia Navarro y la CC de Clavijo no le daban ni dos telediarios de vida. Primero era que no se iban a comer el turrón de 2019 y después que en la primavera de 2020 llegaría la ruptura interna, la censura y todo volvería a su estado 'natural': CC en el poder y el resto alrededor, en el tradicional baile de la silla.

Es verdad que después todo se trastocó con la pandemia. Las conspiraciones se detuvieron ante la aparición de un invitado imprevisto que ha roto el tablero de la salud, ha dinamitado el de la economía, ha enturbiado el de la política y ha emponzoñado el de la convivencia social. Pensar ahora en una censura parece para muchos una frivolidad, pero lo mismo debió pensar Patricia Hernández cuando en pleno estado de alarma la desalojaron del poder en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, en una prueba más que evidente de que CC no se va a estar quieta, pues precisa algún cuartel de invierno en el que rearmarse hasta las siguientes elecciones. En la capital tinerfeña ya tiene uno y el otro se lo presta, como si fuese una vivienda vacacional, el PP canario sector 'sacrificaremos lo que sea con tal de tocar de poder'.

La votación de ayer vale lo que vale: se aprueban los segundos presupuestos del Pacto de las Flores. No elevemos conclusiones a definitivas. Pero hoy el cuatripartito ha superado otra montaña en su particular travesía.

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