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La rueda y el hámster

Frecuencia modulada ·

«Tras el queso, las grandes empresas buscan recuperar en el dinero que dejaron de ganar»

Lunes, 18 de octubre 2021, 07:52

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Hay quien cree que dar vueltas en una noria minutos, días, semanas, meses e incluso años tiene un punto práctico. Un buen orador defenderá con soltura la operatividad de la rueda como artilugio «imprescindible» para hacer más feliz la vida del hámster. «Es un gran corredor y necesita hacer ejercicio aunque esté encerrado en una jaula», explicará el vendedor de la tienda de animales apostillando que «no soltar esa energía podría volver al roedor muy agresivo». Nada como estar entretenido para que el 'bicho' olvide que hay otras formas de que el archipiélago avance. El turismo vuelve, los hoteles reabren, el comercio se reactiva y la economía canaria vuelve a girar ciega en la misma rueda de siempre.

Siguiendo el olor del queso de la recuperación, las grandes empresas -las pymes ya tienen bastante con sobrevivir- buscan recuperar en pocos meses el dinero que dejaron de ganar en el año y medio de parón de la pandemia. El objetivo no es que ingresos y gastos vuelvan a cuadrar dejando algo de beneficio, una meta lícita y moral para todo aquel que pone en riesgo su dinero. La noria se mueve con rapidez para que 'los de siempre' sumen en su calculadora ya mismo ratios de ganancias de dos dígitos, para que la brecha entre ricos y pobres continúe acrecentándose en este archipiélago.

El dueño de la mascota vuelve a disfrutar del juego mientras las 'kellys' en los hoteles, los camareros en las terrazas o los dependientes en los comercios se afanan por hacer el trabajo con la mitad de la plantilla aún en ERTE pese a que los negocios empiezan a funcionar ya a niveles similares prepandemia. Cobran lo mismo o menos que antes del 14 de marzo de 2020 pero trabajan el doble o más.

La esperanza de que este desequilibrio histórico entre sueldo de empleados y volumen de negocio acabe con las «espectacular» temporada turística de invierno ayuda por el momento a que el roedor siga moviendo los pies en la rueda. Con los salarios más bajos del país, con el mayor índice de temporalidad y con un nivel de paro juvenil vergonzante, Canarias aborda su salida de la crisis sin afrontar los problemas estructurales de una economía incapaz de verse en el espejo, ni siquiera cuando la lluvia de millones de la UE reabre la posibilidad de romper de una vez la jaula.

Mucha energía limpia, muchas nuevas tecnologías, mucho cambio de modelo...Y una vez más el ratón seguirá sudando, sin parar, pensando que ya tiene suerte concontar al menos con una rueda que gira y gira sin que nadie sea capaz de pararla.

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