¿Menos impuestos o festivales?

En la política y en los medios de comunicación pasa un fenómeno similar. No hemos tomado las medidas suficientes y a tiempo para lograr frenar el proceso de estupidización. Y ahora, aquello que se narraba de forma hilarante en 'Idiocracia' nos acompaña cada día en un titular o en una promesa electoral.

El asunto es que, como ha ocurrido con el cambio climático, ya solo lo podemos «mitigar», con el inconveniente añadido de que cada vez el proceso va más rápido. Política y periodismo compiten por la última simplonería viral en TikTok. Y claro que se hace viral una estupidez. La capacidad humana de reír bien merece dedicar dos minutos a la última ocurrencia. El problema es cuando el espectro de posibilidades se agota en la estulticia.

Y en ese punto estamos. En el peor de los casos, pasando de votar hoy porque todos los partidos son lo mismo y el mejor sistema electoral es el de que gobiernen los mejores. Da igual que esta teoría, la versión de bar de lo que ya dijo Platón muchísimo antes de que existiera el cristianismo, esté más que refutada.

En el mejor, con un sobre en la mano pensando qué papeleta meter según me convenga pagar menos impuestos o ir a más festivales, obviando que la política es la forma común en que nos organizamos como sociedad, no la gestión del tiempo de ocio personal. Después pasa como ahora, que tenemos risas pero falta sanidad.