Este artículo se centra en el transporte terrestre en Gran Canaria. Son muchos los problemas a solucionar. El principal indicador que muestra que existe un problema está en los sufridos atascos que se forman diariamente en la GC-1 a su paso por Telde, en la Avenida Marítima a la salida del Puerto o en la Circunvalación de Las Palmas de Gran Canaria. También hay problemas en las carreteras de interior, siendo significativas las manifestaciones de los vecinos de varios municipios ante la dificultad de ir caminando por los tramos entre barrios. También existen problemas localizados que pueden y deben solucionarse, como las molestias generadas por el tráfico de los camiones de basura de toda la Isla a su paso por determinadas calles camino del vertedero de Salto del Negro. El Cabildo de Gran Canaria es responsable del funcionamiento de las carreteras de la Isla, tanto de las de interés insular como de las de interés regional. Esto ocurre desde la entrada en vigor del Decreto 112/2002 de traspaso de funciones de la Administración Pública de la Comunidad Autónoma de Canarias a los Cabildos Insulares en materia de explotación, uso y defensa y régimen sancionador de las carreteras de interés regional.
Detengámonos en primer lugar en cómo está organizado el Cabildo para hacer frente a los problemas de transporte terrestre. Mientras las infraestructuras dependen del Consejero de Obras Públicas e Infraestructuras, Arquitectura y Vivienda, el transporte (incluida la empresa pública Ferrocarriles de Gran Canaria S.A.: el tren) depende del Consejero de Presidencia y Movilidad Sostenible. Curiosamente son los Vicepresidentes Primero y Segundo del Cabildo y de partidos distintos.
Antes esta dicotomía resulta complicado determinar quién es el responsable de solucionar los problemas en las carreteras de Gran Canaria. Debe distinguirse entre quien debe analizar, diagnosticar y proponer las soluciones a los problemas existentes y futuros y quien debe ejecutarla. A nuestro juicio el Consejero de Obras Públicas quedaría subordinado al de Movilidad que es el que debe establecer la estrategia para solucionar los problemas de transporte terrestre.
La escasa importancia que le da el Cabildo de Gran Canaria a solucionar los problemas de transporte terrestre se muestra al comprobar que el mismo Consejero preside ¡11 servicios!, entre los que se encuentra el de Transportes, además de ser alcalde de su municipio. La mayor parte del dinero destinado a Transportes corresponde a las bonificaciones y el fomento del transporte público. En cuanto a la Consejería de Obras Públicas e Infraestructuras, Arquitectura y Vivienda, llama la atención que en el capítulo de inversión en carreteras del Cabildo de Gran Canaria no exista ninguna relación de obras que acometer. Hay dos partidas alzadas de 18.194.596,94 euros a la que se suma otra de 6.000.000,00 euros, sin ninguna justificación.
Con un Consejero sin tiempo para dedicarle a la Movilidad y sin una relación concreta de actuaciones a ejecutar para mejorar las condiciones del tráfico en las carreteras es muy difícil adivinar qué está haciendo el Grupo de Gobierno del Cabildo para mejorar la situación actual en las carreteras grancanarias. Quizá consideren que no es necesario actuar y que el comportamiento del tráfico en el escenario actual es correcto. Pero lo cierto es que es fácil perder un avión por los atascos diarios en la GC-1 a su paso por Telde.
El Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria ha determinado que, básicamente, la red de carreteras de Gran Canaria es suficiente en su configuración actual, lo cual no implica que no haya que actuar sobre las carreteras existentes para adecuarlas y mejorar su nivel de servicio. Ante la ausencia de noticias por parte del Grupo de Gobierno, no han sido pocas las iniciativas presentadas sobre esta cuestión por el Grupo Coalición Canaria, como la propuesta del acceso directo desde la Circunvalación al Ecoparque Norte, evitando pasar por las calles de Las Palmas de GC, o la propuesta de mejora de los márgenes de algunos tramos de carretera para fomentar la movilidad peatonal en condiciones de seguridad y correcta accesibilidad y transitabilidad (Tramo Montaña de los Vélez-Las Rosas o el Programa de Movilidad Sostenible en áreas rurales).
El PIO-GC también determina que se debe construir un tren entre Las Palmas de Gran Canaria y el Faro de Maspalomas, con parada en el aeropuerto y en varios sitios más (son 11 estaciones en total). Aún ni están redactados todos los proyectos ni existe Declaración de Impacto Ambiental, ni se dispone de financiación. El presupuesto del tren en su conjunto estará por encima de los 2.000 millones de euros. A pesar de eso, el Consejero de Presidencia y Movilidad ha lanzado el anuncio de que se va a proceder con las expropiaciones de los terrenos afectados por el ferrocarril (en una cantidad de euros nada desdeñable). Habida cuenta del escenario descrito y de la forma de actuar del Grupo de Gobierno, carente de ninguna planificación conocida, el Grupo Político Coalición Canaria apuesta por la participación del Gobierno de Canarias para llevar a buen puerto este proyecto. De otra forma, nos podemos encontrar con otra Metroguagua al que llamaremos Metrotren (el nombre le va bien porque más del 50% de su recorrido se realizará en túnel), cuyas obras tardarán varias generaciones de grancanarios en ver terminadas y en servicio.
El Grupo Coalición Canaria considera necesaria la máxima transparencia y participación pública en la toma de decisiones que afectan a los hábitos de movilidad y convivencia ciudadana. Un ejemplo lo encontramos en la desembocadura del Barranco del Guiniguada, pieza territorial que ha sido motivo de debate durante más de 20 años, donde los informes de varias áreas del Cabildo (carreteras, aguas, política territorial, medioambiente) serán preceptivos y vinculantes. No es un mero problema municipal. Un año después de las elecciones, no tenemos conocimiento de si será necesario mantener la carretera tal y como está, si se pueden reducir carriles o si se puede eliminar por completo.
Son muchos los problemas de Movilidad en Gran Canaria. El Cabildo de Gran Canaria dispone de las herramientas necesarias y unos recursos humanos excelentes para encontrar las mejores soluciones. Basta que siga el ejemplo del tercer hermano de la ya vieja canción de Silvio Rodríguez y ponga «un ojo en el camino y otro en el porvenir», que actúe con perspectiva de futuro atendiendo a la realidad del presente.
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.