Dos apuntes para abrir la semana
Del director ·
El asesino confeso se fue por la puerta como si nada
Caso Romina. El mundo judicial tiene unos mecanismos que en muchas ocasiones resultan difíciles de comprender por el ciudadano. Y eso no es bueno. ... Si hay una institución que merece tener el mayor crédito entre hombres y mujeres, es aquella que, por su condición de garante de la legalidad, fiscaliza las actuaciones de los otros poderes.
Digo esto a cuenta de lo vivido el pasado viernes en el arranque del juicio por el asesinato machista de Romina, una vista que se retoma este lunes. Después de cuatro años negando la mayor, el acusado se sienta en el banquillo, reconoce la autoría y ya sabemos que será condenado. Es más, prácticamente sabemos hasta la cuantía de la condena. Pero acto seguido, al acabar la primera sesión del juicio, sale por la puerta como cualquier hijo de vecino y se va de fin de semana hasta hoy.
Por si alguien se ha perdido, lo reitero: hablamos de un asesino confeso. Vale que técnicamente no se ha producido una condena, pero por eso mismo urge revisar los procedimientos y, evidentemente, la legislación. Imaginemos, a sabiendas de que las comparaciones son odiosas, que alguien acude un viernes por la noche a la comisaría de policía de un pueblo perdido en la España vaciada y confiesa que es autor de un asesinato. Pero resulta que como no hay juzgado en la zona y hace mal tiempo, el agente policial le dice que se vaya tranquilo a casa y que regrese el lunes, que ya habrá tiempo para llevarlo ante el juez de turno... Pues algo así ocurrió el viernes.
En cuanto a la fijación de la condena, ¿cómo se valora el daño causado a la familia no solo por el asesinato, sino por la burla que supone estar cuatro años negando el crimen para ahora reconocerlo? Concluyo: me encanta saber que el sistema judicial español es garantista a más no poder, pero también me gustaría que se aproximase algo más al sentido común.
El pacto está hecho. Salvo un cataclismo, no se va a quebrar la entente entre CC y PP por desencuentros en islas como Fuerteventura o por tiranteces locales como las de San Bartolomé de Tirajana. Coalición y Partido Popular se han juramentado para que Fernando Clavijo sea presidente y Manuel Domínguez sea su vicepresidente. Llevan hablando desde el minuto uno en que se abrieron las urnas, a lo que se añaden las conversaciones previas entre ambos partidos. Y es un diálogo que quieren sellar rápido porque esas formaciones, como el resto, se lanzan ya mismo a poner de nuevo en marcha la maquinaria electoral. Así las cosas, esta semana puede estar hecho el pacto... ese que ya hay.
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