Ciénaga de mentiras
Ultramar ·
Sólo con la verdad y atendiendo a los creíbles preservaremos la salud democráticaEn la reciente 18ª Jornada Nacional de Periodismo, organizada por la Asociación de Periodistas Europeos, con la colaboración de la Fundación Coca Cola, bajo el genérico título 'Las perversiones de los medios', se abordó el papel de estos, en tanto en cuanto, como la energía nuclear, son de doble uso, medicinal o bélico ya que pueden ser sembradores de concordia civil o de antagonismo cainita, mucho más en estos tiempos de especial protagonismo de las redes sociales, que multiplican las fuentes de alimentación y ofrecen canales de difusión suplementarios que, careciendo de filtros periodísticos profesionales, facilitan la crecida del odio o la falsedad desde la irresponsabilidad del anonimato.
En esa jornada el volcán de La Palma, con ese sinfín de imágenes de perversa belleza que ofrece desde el primer momento, estuvo en boca de todos y en una de las conversaciones la editora y presentadora de Informativos Telecinco Fin de Semana, Ángeles Blanco, contó que a los pocos minutos del inicio de la erupción ya corría por las redes un audio con unas 'sensacionales' tomas comentadas con acento canario que se presentaban como si hubiesen sido filmadas en ese mismo instante en la Cumbre Vieja, cuando al poco se pudo comprobar que eran de un episodio volcánico en Islandia de hace unos años. Alguien se había 'preocupado' de hacer el montaje casi 'en vivo', añadiendo así un nuevo capítulo a la ciénaga de mentiras a la que muchos nos arrastran. Minutos más tarde las imágenes cedidas por Televisión Canaria sí mostraban la verdadera realidad, poniendo en valor el atractivo de la verdad y demostrando, como dijera Iñaki Gabilondo, que hoy más que nunca necesitamos periodismo de calidad en defensa propia.
Sin embargo, vivimos tiempos de crisis y confusión, en los que no solo se cuestionan las opiniones, algo legítimo, sino también los datos, en una borrachera de sobreinformación, que no es otra cosa que una inundación. Sobra agua, mucha agua, pero apenas hay potable. Encontrarla es cuestión de supervivencia.
Es cierto que los 'perversos' medios, tan cuestionados en esta época de excesos 'informativos', no pueden dar todas las noticias, pero las que dan tienen que ser verdad. Así las cosas, la credibilidad solo puede ir al alza. El volcán de La Palma está sirviendo también para esto. Aprenden los volcanólogos, también los informadores y la ciudadanía toda. Sólo con la verdad y atendiendo a los creíbles evitaremos la ciénaga. Cuestión de salud e higiene pública.