El presidente del Supremo culpa a PSOE y PP del «desolador» estado del tribunal

Marín Castán, que hace 11 meses relevó al dimitido Carlos Lesmes, quien tiró la toalla ante la falta de respuesta de los políticos para desbloquear el Consejo, ha apremiado a PSOE y PP a afrontar «con urgencia» la renovación del órgano de gobierno de los jueces, que va camino de los cinco años de interinidad. A ambas formaciones, sin mencionarlas directamente, les ha pedido tener altura de miras en un momento de polarización extrema: «Es la hora de los grandes políticos y de los grandes demócratas», ha reclamado.

En su discurso de apertura del año judicial, un solemne acto celebrado en el Tribunal Supremo, el magistrado ha pedido «un verdadero compromiso democrático de cooperación leal entre los diferentes actores políticos», que defiendan el buen funcionamiento y la independencia del Poder Judicial dando soluciones a la situación de la justicia.

Y, dando un paso más, en un contexto político donde la amnistía a los acusados por el 'procés' aparece como elemento clave para la gobernabilidad del país, Marín Castán ha instado a estos «actores políticos» a que se abstengan «de todo comportamiento que de alguna manera pueda erosionar la consecución del mencionado objetivo», porque, de otro modo, «la democracia, y en consecuencia el Estado de Derecho, corren un serio peligro».

Para ello, ha solicitado a las fuerzas parlamentarias responsable de salir de este atolladero institucional «que dejen de lado las emociones y los tribalismos, e incluso los grandes postulados de la apuesta partidaria, en favor de principios constitucionales más elevados». De lo contrario, ha remachado Marín Castán, «sería una enorme decepción sentir su falta».

De forma previa, el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ha planteado que "a las puertas de una nueva legislatura" es el momento "de plantear cambios, retos y proyectos". "No sabemos qué nos deparará el futuro, pero estoy seguro de que quien asuma la responsabilidad del Gobierno de España tendrá entre sus objetivos afrontar una reforma sustancial de la justicia en nuestro país", ha vaticinado el máximo representante del Ministerio Público.

García Ortiz, que el año pasado causó baja por enfermedad, ha repasado las claves de la memoria anual de su departamento y ha reiterado, como ya hicieran sus antecesores, la necesidad de reformar el modelo procesal español y equipararlo al de otros países europeos, donde el fiscal aparece como "director de la investigación penal".

También ha explicado que la Fiscalía "está abierta a cambios y a asumir nuevos retos y responsabilidades". "No nos inquieta cambiar o mejorar las garantías de imparcialidad de la institución, de los fiscales o del fiscal general", ha dicho, en referencia a la modificación del sistema de elección de su puesto por parte del Gobierno de turno.

Sobre otro asunto central de su discurso, la lucha contra la violencia machista, García Ortiz ha criticado que "el discurso negacionista influye directamente en la protección de las mujeres", ha dicho en velada referencia a Vox. "España es un referente en la lucha contra la violencia de género y no podemos ni debemos retroceder", ha reivindicado.