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Unidas Podemos ve «aristas» en las negociaciones para la reforma del delito de malversación y asegura que estudiarán «atentamente» y de la mano de sus servicios jurídicos el borrador de una propuesta que aún se está fraguando entre PSOE, ERC y la coalición morada. Su portavoz parlamentario, Pablo Echenique, reconoce que se trata de «un tema delicado que hay que estudiar con mucho cuidado» y reconoce que las fuerzas que componen el espacio que abandera Yolanda Díaz aún no han debatido la cuestión internamente.
Todo ello un día después de que el presidente del grupo parlamentario morado, Jaume Asens, afirmara que su formación defiende hace tiempo que el delito de malversación endurecido por el PP en 2015 «está redactado de forma vaga, genérica», y ha dado lugar a «interpretaciones abusivas». El objetivo, aseguró, es diferenciar claramente «cuándo alguien ha utilizado recursos públicos para lucrarse o no».
Sedición y malversación
Paula De las Heras María Eugenia Alonso
Asens, también diputado de los comunes, ha llevado las riendas de Unidas Podemos en la negociación de este asunto junto a PSOE y ERC. Echenique aseguró que se ha informado a todas las fuerzas que componen el espacio morado, incluido a Podemos, aunque insinuó que en este asunto no hay una postura conjunta entre estos partidos. «No es un tema que hayamos debatido en el grupo parlamentario. Jauma Asens es un jurista de reconocido prestigio, pero es un debate que está por ocurrir», especificó el portavoz.
Sin embargo el portavoz adjunto y dirigente de IU, Enrique Santiago, se ha mostrado de forma paralela partidario de modificar este delito, al argumentar que es una cuestión de «seguridad jurídica» diferenciar lo que es una gestión ineficiente de recursos públicos y el enriquecimiento personal, es decir, «robar».
En cuanto a la reforma del delito de sedición, Echenique valoró «postivamente» la propuesta del Gobierno y recordó que fueron ellos los que, en 2017, ya se mostraron favorables a ello, «cuando defenderlo era muy difícil». Sin embargo, desconfían que este movimiento lleve aparejado un agravamiento del delito de desórdenes públicos. «Estamos estudiando jurídicamente la situación. Es verdad que se ha propuesto por parte del PSOE un agravamiento del delito de desórdenes públicos que despiertan recelos entre algunos juristas. Tenemos a nuestro equipo jurídico estudiando el asunto porque es un asunto que nos preocupa», zanjó.
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