Óscar Puente, núcleo duro del PSOE para Transportes

Puente (Valladolid, 1968), licenciado en Derecho por la Universidad de Valladolid, con un máster en Dirección Política por la Fundación Jaime Vera y abogado en ejercicio hasta 2015, milita en el PSOE desde 1990 aunque no inició su carrera política hasta 2004, cuando fue nombrado vicesecretario general de la Ejecutiva Provincial de Jorge Félix Alonso.

Polémico tuitero y curtido en los tribunales por su formación académica, se convirtió en alcalde de Valladolid en 2015, cuando arrebató el bastón de mando al histórico Javier León de la Riva (PP) tras veinte años como regidor, pese a que sólo obtuvo ocho concejales frente a los doce del PP gracias a un pacto con Valladolid Toma la Palabra (VTLP) y SíVa (Podemos). También fue, desde noviembre de ese año, presidente de la Red Española de Ciudades Saludables de la Federación Española de Municipios y Provincias, FEMP. En los comicios de 2019 logró conservar la alcaldía, pero no fue así el 28-M, cuando vivió una campaña accidentada después de sufrir un percance por el que tuvo que ser operado por una ruptura de cuádriceps.

Con su nombramiento, Pedro Sánchez premia la lealtad de Puente, que fue uno de los dirigentes que se mantuvo a su lado frente a Susana Díaz en su caída y resurrección como secretario general del PSOE entre octubre de 2016 y mayo de 2017. Se deshace de Raquel Sánchez, la alcaldesa de Gavà (Barcelona) que había sido nombrada por sorpresa en 2021 en sustitución de José Luis Ábalos para impulsar las políticas públicas de transporte y vivienda.

Bajo su mandato se aprobó la gratuidad del transporte público titularidad del Estado (fundamentalmente trenes de Cercanías) para hacer frente a la crisis inflacionista derivada de la guerra de Ucrania. Esta medida se convertirá en permanente -según anunció el presidente Pedro Sánchez en su intervención de investidura en el Congreso- pero focalizada en menores, jóvenes y personas desempleadas, y de este proyecto se encargará Puente.

Pero sin duda su misión más importante será la negociación del complicado traspaso de la red de Rodalies a la Generalitat de Cataluña durante esta legislatura.

Su regreso a la primera línea política llegó el pasado mes de septiembre, cuando fue elegido para dar la réplica a Alberto Núñez Feijóo en la sesión de investidura del candidato de los populares. «De ganador a ganador». Ese fue el tono irónico que escogió este fiel escudero de Sánchez para desarmar al presidente del PP. Su aparición provocó la risotada del hemiciclo y la sorpresa entre las filas del PP, que hasta el último minuto esperaban a Pedro Sánchez o Patxi López.

Pero la elección del exacalde de Valladolid aquel 23 de septiembre no fue baladí, teniendo en cuenta que su situación tras las elecciones municipales del 28 de mayo era la misma con la que el líder gallego aspiraba a ser investido presidente: el PSOE fue la fuerza más votada en el consistorio vallisoletano y, pese a ello, perdió la alcaldía por una coalición entre PP y Vox en favor del popular Jesús Julio Carnero.

Con todo, la relación con Pedro Sánchez también ha tenido algunas sombras. En 2021 fue designado portavoz de Ferraz, pero tras dos ruedas de prensa fue relevado por el diputado jienense Felipe Sicilia.