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A. Adalid
Martes, 26 de septiembre 2023, 13:31
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Zaragoza tiene un papel protagonista en la industria del automóvil: General Motors inauguró en 1982 su mayor planta de producción en Europa, una factoría de la que han salido millones de unidades y que ahora, bajo el paraguas del grupo Stellantis, produce el mítico Corsa, pero también modelos de Citroën, Peugeot y, en pocos meses, de Lancia, generando un polo industrial de máximo nivel en Europa para el que incluso se baraja la creación de una 'gigafactoría' de baterías. En cambio, la ciudad ha vivido de espaldas a su protagonismo como potencia industrial del automóvil… hasta ahora, ya que Mobility City ha llegado para revolucionar la oferta cultural, empresarial y de ocio con una propuesta única: un Museo dentro de un puente.
La Fundación Ibercaja se ha encargado de tomar uno de los edificios más reconocidos de la Expo del Agua del 2008, el puente de la arquitecta Zaha Hadid, y convertirlo en un lugar de visita imprescindible si vamos a la capital aragonesa.
El Puente se alza sobre el Ebro en la zona que se urbanizó con motivo de la exposición del ya lejano 2008. A partir de esa fecha, todos los edificios han ido encontrando un uso social, educativo o institucional, y el último en llegar es este Museo del Automóvil del siglo XXI. Zaragoza quiere convertirse en una ciudad líder en movilidad, y tiene el tamaño adecuado, ni muy grande ni pequeña, para ser el laboratorio de ideas que dé lugar a esa movilidad ecológica, sin accidentes y sin atascos con la que todos soñamos.
Todo esto se refleja en Mobility. Lo que éramos en movilidad, lo que somos y lo que, probablemente, seremos. en el Puente hay tres espacios diferentes: el de mayor uso es el puente 'de paso' convencional, abierto y libre al público, y donde ya se muestran muchas piezas que reflejan cómo está cambiando la movilidad: coches eléctricos, taxis aéreos y autónomos, o asistentes que se mueven solos por el museo nos enseñan algunas de las tecnologías más innovadoras que tenemos hoy -coches eléctricos o de hidrógeno, por ejemplo- y las diferentes formas en las que nos vamos a mover en los próximos años.
Si además de cruzar por el puente, queremos entrar en la zona de exposición, nos van a sorprender los coches exhibidos: viajamos del inicio al presente del motor de combustión con coches como el fantástico Bugatti Chiron, el coche más potente del mundo con 1.200 CV, hasta prototipos de leyenda en Le Mans o Fórmula 1. Los verdaderos aficionados disfrutarán de los Jaguar, Ferrari o Lotus expuestos en el museo aragonés, todo un deleite para los amantes de los clásicos y que permite conectar la vanguardia con el pasado.
Tras descubrir de forma pausada esta bonita zona, se pasa a un recorrido por el mundo del transporte: los barcos, los trenes, la aviación y el automóvil se explican de forma didáctica para niños y mayores, para comprender de dónde venimos y a dónde vamos. En este campo, el del futuro, entendemos muchas de las cosas que ocurren ahora mismo: baterías desmontadas de coches eléctricos, chasis completamente abiertos que permiten ver la ubicación de las baterías o la mecánica, componentes actuales que parecen llegados del futuro, como pilotos, luces o equipos multimedia… y movilidad, mucha movilidad: desde el tren Hyperloop de Elon Musk hasta los taxis aero-transportados de despegue vertical, y los famosos 'eVTOL' que en los próximos años podrían revolucionar la forma en que viajamos por las ciudades.
El museo culmina en su parte alta con una zona interactiva: jugando a videojuegos y con gafas de realidad virtual para entender qué es lo que pasa a nuestro alrededor cuando conducimos un vehículo de nueva movilidad.
La visita, completamente explicada por los asistentes interactivos, nos llevará un par de horas, recorriendo un magnífico edificio tan importante como el contenido. El punto final de Mobility es una sala de conferencias abierta a todo tipo de eventos y que es ya un punto de referencia no solo para la sociedad aragonesa: cada vez más eventos nacionales, como los próximos premios Impulso 817 de octubre), se celebran en este lugar.
Mobility City es una excelente idea que nos permite introducirnos de lleno en los retos de la nueva movilidad, involucrar a la ciudad zaragozana en el futuro del automóvil y comprender que el automóvil y la movilidad es mucho más que fábricas son un polo de riqueza y tecnología capaz de mover la economía de un país, como sucede en el nuestro, segundo productor de vehículos en Europa después de Alemania y en el TOP 10 global de fabricación de automóviles.
La visita a Mobility nos parece imprescindible para que niños y adultos entendamos más la movilidad que viene, y solo echamos en falta más espacio para que los coches e ideas luzcan con mayor esplendor. ¿Trabajará Mobility en una futura ampliación? Es pronto para saberlo, pero de momento Zaragoza ya está en el mapa de museos que hay que conocer, y en este caso se trata de uno muy interactivo que nos cuenta tanto del pasado como del presente y del futuro de la historia del automóvil.
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