Moldavia vota este domingo entre seguir el camino hacia Europa o acercarse a Rusia
Las autoridades del país temen intentos dirigidos desde Moscú para desestabilizar estas elecciones parlamentarias
Álex Bustos
Moscú
Sábado, 27 de septiembre 2025, 16:25
Los moldavos están llamados este domingo a pasar por las urnas para formar la composición de su Parlamento y confirmar el acercamiento a Europa o ... frenarlo. En estos comicios los grandes bloques que se disputarán la cámara baja moldava son el PAS (Partido de la Acción y Solidaridad) de la presidenta Maia Sandu y el Bloque Patriótico (la unión del Partido Socialista y Comunista, entre otros). Mientras el primero es una formación de centro-derecha pro-UE, su oposición es mayoritariamente de izquierda prorrusa. Las autoridades temen un nuevo intento de compra de votos por parte de oligarcas afines a Moscú como ya denunciaron en 2024.
En el timón del país está ahora el PAS, que busca proseguir en el camino europeo y al que las encuestas le pronostican cerca del 33% de los votos. Enfrente tendrá el Bloque Patriótico, nostálgicos de la época soviética y partidarios de un enfoque más prorruso de la política internacional del país, que podría obtener un porcentaje similar de votos. Según explica a este medio el profesor asociado de la Universidad de Oakland Cristian Cantâr, el motivo de la creación de esta coalición en 2025 es «evitar perder votos prorrusos» al unir a varias formaciones con esa ideología.
Maia Sandu denunció recientemente que Rusia lo que pretende es «capturar Moldavia mediante las urnas contra Ucrania y convertirnos en una plataforma de lanzamiento para ataques híbridos contra la UE». Las opciones proeuropeas son las favoritas de la amplia diáspora moldava, en la capital y en las partes centrales del país. La población urbana y joven es la más propensa a esta opción.
La comisaria europea de Ampliación, Marta Kos, aseguró este martes que Moldavia ha mostrado estar bien preparada para acceder al siguiente nivel de la adhesión a la UE. Desde 2022 es un estado candidato a integrarse en la Unión aunque le falta camino por recorrer. En cambio, en las regiones situadas al norte, Gagauzia y el territorio rebelde de Transnistria, las opciones prorrusas suelen tener más popularidad. Las generaciones más mayores se inclinan por Moscú.
El Kremlin controla e influye sobre la región de Transnistria, donde tiene tropas desplegadas
En otras ocasiones, como las presidenciales de 2024, las autoridades aseguraron que hubo compra de votos a favor de Rusia. Según explica Cantâr, «la policía ya ha identificado a sospechosos de comprar votos, que buscan minimizar el sufragio pro-UE. El Kremlin y sus aliados en Moldavia, especialmente el oligarca fugado Ilan Shor, aún tratarán de comprar votos en 2025». En opinión de este experto, «el problema es que las instituciones están sobrepasadas con los intentos de desestabilización rusa, tienen dificultades para seguir todos los intentos de minar el proceso electoral».
Desde el otro lado, según referencia de la agencia TASS, el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia asegura que Bruselas «no tiene intención de renunciar a sus planes de ocupación de Moldavia, incluso en el caso de que la evolución inmediatamente después de las elecciones no requiera una intervención externa». Augura «provocaciones armadas contra Transnistria y las tropas rusas desplegadas en la región». El Kremlin controla e influye desde los años noventa en una parte del país europeo, Transnistria, que funciona como un estado sin reconocimiento. Ni siquiera Rusia lo reconoce como país oficialmente, aunque es su garante de seguridad y tiene numerosas tropas en esta región como 'fuerza de paz' tras la guerra que duró de 1990 a 1992 entre el ejército regular moldavo y las fuerzas separatistas transnistrias.
«Reducto de la URSS»
Desde entonces, esta zona se ha convertido en una rareza, llamado por los reporteros de viaje «el último reducto de la URSS» por su abundante simbología de la época. En la práctica es una herramienta de presión contra Moldavia, tal y como sucede con Osetia del Sur y Abjasia, oficialmente parte de Georgia.
Desde allí un residente local, Tim, explica que no se siente ningún peligro inminente en este territorio. «La situación en Transnistria es como siempre, tranquila y calmada», apunta a este medio. Aunque muchos de los habitantes de esta región tienden a la rusofilia, en elecciones pasadas se han fletado buses para que los votantes fueran a las urnas en ciudades controladas por Chisinau (capital de Moldavia) previo pago. No está claro quién organiza estas «excursiones» electorales pero sí se sabe que se les suele pedir que voten por opciones prorrusas.
¿Ya estás registrado/a? Inicia sesión