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Un lunes al sol en "la mejor fiesta de Canarias"

Un lunes al sol en "la mejor fiesta de Canarias"

Erin Vera Olivares

Jueves, 1 de enero 1970

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La Bajada de la Rama atrajo a miles de personas a Agaete para disfrutar desde la madrugada de este lunes una de las fiestas más populares de Gran Canaria. El calor abrasador no impidió ver a la gente saltar agitando las ramas al son del himno de la fiesta.

La opinión es unánime. "Este año hay menos gente porque cae en lunes", aseguraron los vecinos del pueblo marinero de Agaete. A pesar de ello, a las 12 de la mañana la calles rebosaban ramas que se agitaban casi cobrando vida propia.

El ambiente es de fiesta y la mayoría de los vecinos cuenta sus anécdotas entre tazas de sopa para tratar de recuperarse de una noche en pie. Incluso los más pequeños trasnochan en este día tan especial para el pueblo, que valora la tradición y costumbre queriendo mostrar la belleza de la fiesta a los niños.

Aunque algunos intentan dormir en el coche, ni la música y muchos menos el barullo descansan. Y es que cuando llega el momento en que los rameros entran por el pueblo, el cansancio deja de ser prioridad y todos acuden a recibir a quienes llevan más de un día cargando ramas desde el pinar de Tamadaba.

La tradición cuenta que sólo los que llevan promesas bailan La Rama y que, dependiendo de la «carga» de esa promesa, la cantidad de ramas es mayor o menor.

A día de hoy, todo el mundo se apunta a esta tradición, según afirma Emedina Godoy, vecina de Agaete que ha vivido la Bajada de la Rama desde que era niña. "Lo que se sigue conservando es que el que lleva más cantidad de ramas es porque tiene una promesa". Y que, a pesar de lo que parezca, la costumbre de ir con la rama hasta el mar continúa: "La gente que realmente es de Agaete o son canarios que conocen el ritual, lo llevan a cabo. La diferencia es que ahora participa todo el que conozca la tradición y no sólo el que tiene una promesa".

En la costumbre también caben las creencias de cada familia. Emedina cuenta que su familia guarda un pequeño trozo de la rama hasta el año siguiente como símbolo de buena suerte. Tanto es así que mucho rameros recelan de que desconocidos toquen siquiera sus hojas.

Con todo, cabe destacar una actitud que parece mayoritaria entre los que visitan este pueblo y es que todos repiten. Desde 4 a 30, pasando por 20 años de fiestas, todos los que viven la Rama de Agaete, quieren volver.

Ni el calor ni las horas trasnochadas suponen una excusa para no saltar con la Banda de Agaete. Por todo eso y más, Yaiza Cebral afirma convencida que "es la mejor fiesta de Canarias".

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