Tercera medalla para Enhamed

El grancanario salió primero del poyete y así se mantuvo en los primeros metros, hasta que un explosivo Bradley Snyder, marine estadounidense que cumplía un año desde que se quedase ciego en Afganistan, impuso un ritmo de carrera que difícilmente pudieron seguir sus rivales, tan solo el chino Bozun Yang y el propio Enhamed que enseguida se lanzaron en su persecución.

Yang aguantó segundo durante buena parte de la prueba, pero en el último hectómetro, el canario, que hasta ahora se había dosificado perfectamente, aceleró el ritmo para terminar rebasándole y haciéndose con la medalla de plata en un maravilloso sprint final. Snyder ganó con un tiempo de 4:32.41, segundo Enhamed con 4:38.24 y tercero Yang con un registro de 4:41.73.

La medalla lograda ha sido muy valorada ya que por la mañana, con sudor y esfuerzo, Enhamed había logrado clasificarse con el tercer mejor tiempo para disputar la final. En su serie, el gran dominador fue el chino Bozun Yang que marcó un tiempo de 4:48.03, mientras que Enhamed se conformó con 4:56.25, ocho segundos más que su bestia negra en estos Juegos, pero superado en esta ocasión en la gran final del 400. En la otra serie fue donde emergió con fuerza el marine estadounidense, que reventó el crono con un tiempo de 4:33.70.

Tras conquistar su tercera medalla en los Juegos Paralímpicos de Londres con la medalla de plata y record de Europa en los 400 libres, Enhamed Enhamed se mostró radiante en sus primeras declaraciones:

“Salí sin ningún tipo de expectativas, sin ningún plan más que marcar el ritmo durante los primeros 50 metros. A partir de ahí tenía claro que el americano Snyder iba a ser quién iba a dirigir el resto de la prueba. En cuanto sentí sus piernas ya sabía que me había adelantado e intenté seguirle para utilizarle como liebre.

No tenía ni idea de cómo iba en la prueba pero en los últimos 100 metros pensé ‘hay que morir y hay que llevar las piernas a saco’. Cuando di el viraje del 350 iba tan fuerte con las piernas que mi cabeza no era capaz de procesar nada, ni tan siquiera pude contar las brazadas como hago habitualmente.

Estoy contento porque cuando llegué a la pared sabía que no tenía más fuerzas para hacer nada más. Llegué exhausto. De hecho cuando he salido del agua he estado bastante tiempo sin apenas moverme.

Estoy muy feliz porque pensaba que como mucho podíamos luchar por el bronce o el cuarto, así que a mi juicio el resultado es excelente en esta prueba porque además he mejorado la marca de Pekín. Hoy me voy más que satisfecho con lo logrado”.

Hoy Enhamed buscará conseguir un nuevo metal en los 200 estilos, su última prueba en el Aquatics Center londinense. La clasificaciónn será a las 10:59 y la final a las 19:31 horas.