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Se consumía el Herbalife Gran Canaria en su impericia en los tiros de perímetro. Se repetía la escena y se asemejaban los porcentajes de siete días atrás, cuando en el Fontes do Sar se firmaba un 36% de acierto. Con cinco segundos en el reloj Oliver intentó una de sus clásicas penetraciones y recibía una falta que llevaba al CAI al bonus. Tras el saque de banda, de nuevo balón para Oliver. El base volvía a iniciar la penetración cuando decidió, desde más de siete metros, levantarse, armar y lanzar. «No lo vi muy claro. Pensaba penetrar, pero cambiaron con el bloqueo directo y decidí tirar. Pero no lo pensé mucho. Cuando lo piensas demasiado no entra, y no lo pensé mucho y ha entrado», confesaba pletórico tras el encuentro.
Albert Oliver es un tipo eficiente. Un director de juego que se la ha jugado desde el exterior en 1268 ocasiones desde que debutó con el Joventut en la ACB el 19 de octubre 1997 y que ha anotado 404 veces. Lo que viene hacer un 32% de éxito en su estadística individual.
Oliver tomó la responsabilidad en un momento de tensión. El partido agonizaba y el CAI no negociaba su rendición. Le correspondió a él tomar la decisión clave del partido. Un hecho que no lo es novedoso tras 16 años de experiencia en la élite y con 35 años de edad. «No es la primera que meto, pero tampoco es la primera que fallo. Así que siempre hay que tirar. El equipo se la quiso jugar conmigo en ese momento y entró. Así que quiero agradecer la confianza. Siempre que tenga la posibilidad tiraré», aseveró el director de juego catalán.
Hasta ese momento, inmerso en la dinámica del encuentro, Oliver está protagonizando una actuación discreta. Había errado sus tres lanzamientos de campo, un lastre que no le peso en el momento determinante del encuentro. «Fueron mis primeros puntos. Pero no está mal, no es para quejarse. Hay días que se te da, otros que no entra nada, pero siempre se llevan bien si se acompañan con la victoria del equipo», significó a la vez que amplió su visión a la globalidad del equipo. «En Santiago tuvimos poco acierto y no perdimos la confianza. Y ante el CAI nos ha pasado igual. Sabemos que al final lo conseguiremos».
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