La otra cara de la renovación
La Unión Deportiva de Sergio Lobera ha sufrido una violenta transformación en las últimas semanas, relevados protagonistas inamovibles de principio de temporada tras la llegada de los últimos fichajes y la reintegración en el grupo de lesionados de larga duración como Ángel López.
Lobera presume en público de fondo de armario. El resto de la categoría mira a la Unión Deportiva y concede, con admiración, la hipótesis de que con las últimas incorporaciones Las Palmas se ha convertido en la mejor plantilla de la categoría. En dos semanas han caído nuevos cinco jugadores los fichados Aythami Artiles, Apoño, Aranda, Masoud y el recuperado Ángel López, un hecho que ha cambiado mucho la nominación de futbolistas elegidos por el entrenador para competir.
Del equipo que comenzó la temporada el pasado 17 de agosto al que recibió el pasado sábado al Jaén en el Estadio de Gran Canaria se produjeron seis cambios. Solo uno de ellos, el del lateral camerunés Tim Atouba, se produjo por lesión. El resto fue relegado por Lobera al banquillo o a la grada. Ellos son Aythami Álvarez, David García, Momo, Tato o Máyor. La temporada es larga y habrá oportunidades para todos, eso se dice desde el cuerpo técnico amparados en un antiguo tópico futbolista. Pero hay quien recela de ese argumento exhibido por el entrenador, añadiendo que la pasada temporada, con una menor versatilidad en la confección de la plantilla, el preparador aragonés se rodeó de un bloque duro de 13 o 14 futbolistas y apenas dio protagonismo a los jugadores secundarios en sus planteamientos.
Hay casos llamativos en cuanto a su pérdida de protagonismo. Por jerarquía, uno de los más significativos es el de Momo. En principio, el extremo debía ser un referente en el proyecto del ascenso. Sergio Lobera empezó a contar menos con él durante la segunda fase de la pasada temporada, siendo casi siempre utilizado como primer relevo. Empezó la temporada actual como titular, pero tras pasar por el banquillo ya en la segunda jornada frente al Alavés en Mendizorroza y ver como el canterano Tana le adelantaba como titular en Soria en la cuarta, fue excluido de la convocatoria para la cita con el Real Jaén.
Un camino similar ha sido el recorrido por Aythami Álvarez, jugador al que las lesiones traumatizaron durante las dos pasadas campañas. Esta la empezó como titular, prácticamente todos los minutos de las tres primeras jornadas. Pero desapareció; estuvo en la grada ante el Numancia y volvió a sucederle con el Jaén.
Casos igual de sorprendentes hay unos cuantos en la plantilla. Sin embargo, uno de los más perjudicados por el viraje de las últimas semanas es Máyor. El delantero fue motivo de fricción durante el verano entre la comisión deportiva y el entrenador, autor del fichaje. A los responsables de la parcela no les seducía su incorporación, tratada con el presidente de forma directa por Sergio Lobera. Ahora, tras partir como titular en el comienzo de la competición, se le reserva un protagonismo residual a pesar de su buen papel en la Copa del Rey ante el Sabadell.
Uno de los que podría también perder su rol es David García, que tras estar fuera del equipo por sanción en Soria, dejó también ante el Jaén su lugar a Aythami Artiles.
Todo eso con Tana y Asdrúbal, dos canteranos encadenados a la órbita del primer equipo, pasando por encima en las preferencias del entrenador de jugadores consagrados y en principio con un rol preferente.