La caída del crudo ahorra a Canarias 1.200 millones
La caída del precio del crudo ha reducido de forma considerable la factura energética de Canarias. En 2014, el Archipiélago se ahorró 1.200 millones de euros respecto al año anterior, según el Ministerio de Economía y Competitividad. En total el Archipiélago abonó 1.381 millones frente a los 2.500 de un año antes.
El fuerte descenso del precio del petróleo desde el verano (el barril de Brent ha pasado desde los 110 dólares a estar por debajo de los 50) ha tenido un efecto positivo para Canarias. El Archipiélago se ahorró el pasado año 1.200 millones de euros de su factura energética, tras caer un 43% el importe de sus importaciones de crudo, según los datos del Ministerio de Economía y Competitividad y facilitados por la dirección del ICEX en Las Palmas. En concreto el pasado año, el Archipiélago importó petróleo por un importe de 1.381 millones de euros frente a los casi 2.500 euros de un año antes.
La caída del crudo también se tradujo en un descenso del importe de las exportaciones de petróleo, de un 73%, si bien las ventas isleñas al exterior de productos energéticos son muy reducidas, de 116 millones (el 8% de lo que se importa). La totalidad del petróleo que se importa es para consumo local, de ahí la repercusión que tiene la caída de los precios del crudo.
Tirón de las importaciones. Las importaciones de crudo fueron las únicas que descendieron el pasado año junto con las de productos químicos, que lo hicieron levemente, un 2,3%, hasta llegar a los 144,8 millones de euros. Las compras del resto de capítulos, vinculados al consumo y a la actividad empresarial, crecieron por primera vez en la crisis, lo que es indicativo de la recuperación económica.
Las importaciones en el sector del automóvil crecieron con fuerza gracias al tirón de los planes Pive. Crecieron un 72%, hasta los 343,3 millones de euros. A continuación se situaron las manufacturas del consumo (textil, calzado o juguetes, entre otros), con un alza del 19%, hasta los 288 millones. Los bienes de consumo duradero (electrodomésticos, muebles o electrónica de consumo) repuntaron un 14,7%, hasta los 69,7 millones de euros, seguido de las materias primas, con una subida del 8,7%, hasta los 26 millones.
Las compras de bienes de equipo (maquinaría para industria, equipamiento de oficina o material de transporte, entre otros) crecieron un 5,7%, hasta los 365,8 millones de euros, derivado de la reactivación.
Las semimanufacturas no químicas crecieron un 2,8%, hasta los 120 millones de euros y por último se situaron las importaciones de alimentación, bebidas y tabaco, que crecieron un 2,4%, hasta los 811,8 millones de euros. Tras el petróleo este capítulo es el que representa mayor gasto. Dentro de este grupo, los productos pesqueros fueron los que más crecieron, un 24%, hasta los 194,3 millones de euros.